Viajar al valle de Codpa es retroceder 30 años. No hay electricidad durante el día y un generador ilumina el pueblo dos horas durante la noche. Las 70 personas que viven allí apenas escuchan el ruido de unos pocos autos, en este pueblo a 120 kilómetros al sureste de Arica.
Esto fue lo que cautivó a Eduardo Ergas, presidente de Valle Nevado, de Ecocopter y del Hotel Plaza San Francisco, para iniciar una nueva apuesta turística: los ecolodges.
El año pasado Codpa sólo contaba con su hostería, un lugar de paso para quienes iban a Arica. Ahí dormían hasta ocho personas en camarotes de fierro, hasta que el año pasado, Cifco - la matriz de Ergas- compró y remodeló totalmente la hostería, invirtiendo en ella cerca de $ 300 millones. Desde marzo muestra su nueva cara.
Además, el empresario está ad portas de inaugurar su segundo lodge en el sur del país, en Tortel, una caleta donde no hay calles, sino ocho kilómetros de pasarelas, y donde la principal conexión con el mundo es una radio mexicana, que ha llegado a marcar el acento de sus habitantes.
Eduardo Ergas está satisfecho con su nuevo negocio, un proyecto que define de largo plazo y al cual quiere incorporar a la comunidad local.
En el caso de Codpa, por ejemplo. la idea es que sus propios habitantes sean los anfitriones de la hostería.
“Es el primer hotel de turismo de intereses especiales que hacemos con una filosofía a largo plazo y que beneficie a la comunidad. No nos puede ir bien si a la comunidad no la integramos. Va a ser un proceso difícil, hay que enseñarles sobre servicio y sustentabilidad, es gente que no tiene noción de eso”, reconoce.
Los primeros pasos
En el desarrollo de este proyecto, una de las primeras decisiones que tomó Ergas fue alejarse del día a día del negocio y darle la confianza a Jean Pierre Beaujanot.
"Codpa es un valle muy bonito en medio de la nada en el desierto. Bajas y llegas a un lugar sumamente verde con frutales, con guayabas, mangos, higos y uvas", describe este ejecutivo, que llegó a trabajar con Ergas a fines del año pasado. Experiencia en el rubro le sobra, ya que estuvo ocho años como gerente del The Westin Palace en España.
De paso descarta cualquier similitud con otros hoteles. "No somos como un Explora, no queremos ni parecernos a ellos, no es nuestro objetivo. Nosotros no somos San Pedro de Atacama, tal vez lo somos, pero hace treinta años, cuando no había luz y con suerte un hotel. No queremos que se produzca un boom inmobiliario en Codpa”, precisa Beaujanot.
Cuando hay luz eléctrica en Codpa también la hay en el hotel de Eduardo Ergas. Esta es parte de la estrategia que quieren implementar en sus lodges, la del respeto a la comunidad. “Nos adaptamos al pueblo y no rompemos nada cuando llegamos. Tenemos un generador propio que funciona similar al del pueblo, o sea de ocho a diez de la noche”, dice.
Otra de las formas de acercarse a la comunidad es la de suministrarse gracias a los pobladores. “La mayor parte de gente que vive aquí son agricultores y nosotros como hotel necesitamos proveedores de esos productos y en vez de pedirlos de Arica, lo hacemos a don José y a la señora Juanita. Este es el modelo que queremos seguir, no hacer hoteles cinco estrellas. Esto es turismo de respeto hacia la cultura, el entorno y hacia las personas”.
Dentro de Cifco reconocen que están innovando en el país, pero que afuera el ecoturismo es una realidad hace ya algunos años. “Estamos innovando sólo en Chile en este tipo de turismo, porque es lo que se está buscando a nivel mundial. El viajero frecuente que viene de vuelta en el tema del turismo, ya se cansó de lugares comunes como Estados Unidos o el Caribe y busca intereses especiales".
Para Ergas fue una satisfacción darse cuenta lo que han creado y que hoy sea una realidad que turistas de todo el mundo hagan la ruta París-Codpa Valley.