Que los parlamentarios de la Nueva Mayoría difieran con el gobierno, en este caso con la fórmula para financiar las escuelas públicas en el proyecto de desmunicipalización, no es una novedad. Lo que sí es ligeramente inusual es que en el propio Ejecutivo haya discrepancias.
El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, señaló que la Cámara de Diputados se equivocó al aprobar el proyecto que crea el sistema de educación pública con la indicación presentada por la diputada PC Camila Vallejo, que obliga al Ejecutivo a enviar, durante el primer semestre de 2017, un proyecto para establecer que el financiamiento de los colegios se determinará según la matrícula, la remuneración de los trabajadores y otras variables. Esta enmienda -jurídicamente inconstitucional- se aleja del modelo propuesto por La Moneda, que mantiene la subvención vinculada con la asistencia de los alumnos.
“El voucher en la educación pública se terminó. Los servicios de educación pueden usar, juntar esos dineros y asignarlos distintos, hay una serie de basales. Por lo tanto, del punto de vista del fondo, que siempre podemos discutir, están equivocados”, expresó Valdés.
Sin embargo, modificar la fórmula de financiamiento es una opción plausible, según lo afirmó la ministra de Educación, Adriana Delpiano. “Se está estudiando y si no se gasta más plata, se puede”.
Senadores entregan fórmulas
En el Senado no hay dos opiniones. Los legisladores de la Nueva Mayoría concuerdan con el gobierno, afirmando que la indicación es inadmisible. Eso sí, varios coinciden con los diputados y piden cambios en el proyecto en su segundo trámite.
El senador de la comisión de Educación, Jaime Quintana, manifestó que “pocos entenderían que en la tremenda reforma a la educación, con desmunicipalización, desarrollo profesional docente y fin al lucro, se mantenga el sistema de voucher y financiamiento por asistencia”.
El senador independiente pro DC, Pedro Araya, concordó y sostuvo que “no puede ser la asistencia a clases el único criterio para entregar recursos, sobre todo considerando que hay costos fijos, por eso se podría buscar una fórmula mixta, que podría partir por el número de matrícula con un cruce por asistencia”.
Una fórmula similar sugirió el senador socialista, Juan Pablo Letelier, quien señaló que “tiene que haber un aporte basal a todos los establecimientos y, a partir de ahí, se tendrán que buscar otros equilibrios, relacionados con matrícula, asistencia y programas educativos”.
La diputada DC, Yasna Provoste, precisó que la modificación aprobada por la Cámara incluye “fórmulas que ya existen”. “Toda la educación rural tiene un financiamiento basal y las escuelas públicas administradas por corporaciones privadas tienen una subvención por matrícula, que se entrega a inicios de cada año”.