"Ha habido una suerte de batalla comunicacional que hemos perdido". Ese fue el severo diagnóstico que hizo la presidenta Michelle Bachelet la semana pasada en una entrevista radial. Su autocrítica lleva de la mano un mandato especial que está asumiendo el ministro secretario general de Gobierno, Marcelo Díaz, quien se encuentra elaborando un nuevo diseño de política comunicacional que pretende instaurar La Moneda. Un rediseño que apunta más allá del nombramiento de una nueva cabeza al mando de la Secretaría de Comunicaciones, que se encuentra acéfala hace tres meses, luego de la salida de Paula Walker el pasado 10 de marzo.
Este escenario de cierto limbo en que se encuentra un área clave del trabajo estratégico del gobierno, ha causado preocupación en la Nueva Mayoría, asunto que ha sido tratado en los últimos comités políticos.
En ese plano, el senador Alejandro Navarro (MAS) llama al gobierno a apurar el tranco, pues ya no se puede seguir dilatando el nombramiento de la Secom: "La decisión para nombrar a un nuevo director o directora de la Secom no debe tardar más horas, porque hay que establecer una nueva estrategia en materia comunicacional y política. Esta política debe constar en difundir de mejor forma lo que hace el gobierno y en llegar directamente a la ciudadanía".
En la misma línea el presidente del Partido Radical, Ernesto Velasco, agrega que más allá de la Secom el tema pasa por una completa revisión de la estructura comunicacional que se elabora en Palacio: "Es central que haya una definición no sólo de la Secom, sino de cómo se comunican mejor las acciones del gobierno. Esa política comunicacional tiene que tener un alto componente de diálogo ciudadano".
Desde La Moneda, su portavoz, Marcelo Díaz, al ser consultado sobre esta inquietud y los plazos que hay para las definiciones señaló que está encabezando un proceso de cambios y que pronto habrá novedades: "Usted ha visto que la Presidenta ha hecho algunos comentarios críticos respecto de la labor comunicacional del gobierno. Asumo que soy el ministro a cargo de las comunicaciones del gobierno. En este mes hemos estado trabajando en los temas de fondo y forma en el rediseño de esta política comunicacional. Luego habrán novedades en esta dirección (Secom) y otras que tienen que ver con la parte comunicacional del gobierno", señaló.
Falta de coordinación
La preocupación en la Nueva Mayoría se debe justamente a que tanto las encuestas como la propia mandataria dan cuenta de que desde el gobierno no se estaría manejando de manera eficiente el aspecto comunicacional. Ello habría permitido que, estas últimas semanas, no sólo se haya abierto una serie de flancos aparentemente imprevistos por La Moneda, sino que no se estén enfrentando coordinadamente en el sector.
Uno de los flancos cuyo tratamiento no fue bien evaluado por el oficialismo, al menos en su primer apronte la semana pasada, es la revelación de que el titular de la Segpres, Jorge Insunza, haya asesorado a Codelco, pero adicionalmente lo haya hecho a Antofagasta Minerals mientras presidía la Comisión de Minería de la Cámara de Diputados. Si bien el ministro salió a responder inmediatamente estas revelaciones, en el oficialismo admiten que particularmente en el segundo caso se genera un manto de duda.
El senador Alejandro Navarro (MAS) incluso reconoció que "fue un error de Insunza presidir Minería y trabajar para una minera" y va más allá, advirtiendo que "de ser efectivo que el ministro realizó asesorías para Antofagasta Minerals en momentos que como diputado presidía la Comisión de Minería, hay un conflicto de interés y una incompatibilidad ética".
La postura de Navarro, compartida por otros de sus pares, está en abierta contradicción con el Ejecutivo, ya que el discurso que optó por levantar el vocero fue que "nosotros no estamos para calificar las apariencias, estamos para gobernar conforme a la ley".
También, el choque entre Educación y el Magisterio a raíz del proyecto de Carrera Docente da cuenta de que La Moneda no ha logrado transmitir con claridad los objetivos buscados a través de esta iniciativa y lo beneficioso de sus efectos.
UN PROBLEMA DE FONDO
Para el director del Magíster en Comunicación Estratégica de la Universidad Adolfo Ibáñez, Juan Cristóbal Portales, el tema comunicacional del gobierno va más allá de quién esté al mando de la Secom y atiende más bien a problemas de fondo que debe resolver prontamente el gobierno: "Se evidencia una falta de estrategia comunicacional para enfrentar un contexto adverso, sobre todo en la crisis institucional generada por el caso Caval y SQM. Pero esa estrategia excede al nombramiento en la Secom y tiene que ver con una incapacidad evidenciada desde los primeros días de gobierno para leer el entorno; entender bien las expectativas ciudadanas y saber ponderar correctamente a los actores políticos y sociales en juego. Una estrategia comunicacional, por tanto, asociada a una estrategia y lectura política errónea y que se define desde el gabinete político mismo, no desde la Secom", expresa el académico.
Portales agrega que es necesario que el gobierno retome luego el timón, con "el control de la agenda política junto con el Parlamento, para aterrizar las reformas en juego al nuevo contexto económico y político adverso (ahora la laboral y educacional) y liderarlas desde la responsabilidad, no el populismo y pretensiones de la mal llamada calle". Así también cree que es necesario, para enmendar el rumbo, un "mea culpa descarnado" de la Presidenta.