El domingo, John Forbes Nash -matemático y economista norteamericano- murió junto a su esposa Alicia Larde en un accidente automovilístico en New Jersey. Tenía 87 años.
Nash hizo su doctorado en la U. de Princeton. En 1950 (a los 22 años) presentó su tesis doctoral sobre la teoría de juegos no cooperativos. Al revés de von Neumann (que junto a Oskar Morgenstern inició el estudio de la teoría de juegos de suma cero), analizó el caso de juegos de suma diferente de cero. De allí surgió el "equilibrio de Nash". A partir de ese momento, todos los políticos, negociadores y microeconomistas lo buscan en cualquier problema.
¿Qué es un juego de suma diferente de cero? ¡El mercado de capitales! A veces todos se preguntan dónde está el dinero cuando el mercado cae y, por lo tanto, casi todos pierden. Otras veces nos preguntamos quién está perdiendo cuando el mercado sube. Todo ello podría fundamentarse a través de la búsqueda del "equilibrio de Nash" para los eventos en que todos pierden o todos ganan. O sea, quién gana más que el otro o quién pierde menos que el otro.
En 1958 publicó un innovador paper asociado a ecuaciones diferenciales lineales en derivadas parciales, por el cual le dieron el Premio Abel de Matemáticas en marzo de este año. Esa fue la última contribución relevante de Nash a la ciencia (cuando tenía 30 años). Ese año recibió la visita de directivos de la U. de Chicago, que le ofrecieron una "tenure". Nash rechazó la oferta porque señaló que lo habían nombrado "Emperador de la Antártica". Además, como trabajaba para la Rand Corporation y asesoraba al Ministerio de Defensa de los EE.UU. tenía delirio de persecución respecto de los soviéticos. Se volvió loco. Se le diagnosticó paranoia esquizofrénica.
Nash pasó en hospitales y con electro-shocks en los 60' y los 70', donde su esposa Alicia Larde lo atendía. Lo que mostró la película "Una Mente Brillante" (con Russell Crowe) es un cuento de hadas respecto de lo que realmente ocurrió. La Universidad de Princeton le dio la oportunidad de que ejerciese allí y le dio una oficina. Pero Nash no estaba en condiciones de dar clases. Corría por el campus, se pasaba hablando solo y rayando las paredes de la biblioteca, de las aulas y de las salas de estudio de la universidad con indescifrables fórmulas y desigualdades matemáticas. Para los estudiantes, Nash era una leyenda viviente.
En los años 80', con el desarrollo de la de la teoría de la organización industrial, de las licitaciones y de las negociaciones comerciales y empresariales, todos empezaron a buscar un "equilibrio de Nash" orientado a buscar acuerdos en los que todos ganan, más de 30 años después de la publicación de su teoría. Nash hizo la contribución seminal a partir de la cual se desarrollaron múltiples aplicaciones a la economía y a las inversiones.
Desde 1990, la enfermedad de Nash entró en remisión. Pasó a tener una condición en que estaba en el límite de lo normal. Recibió el Premio Nobel de Economía en octubre de 1994.
¡Gracias Nash!