Después del protocolo de acuerdo firmado el martes pasado, donde se establecieron los lineamientos centrales de los cambios a la reforma tributaria, debe comenzar un proceso tan o más complejo que el mismo acuerdo: la redacción de las indicaciones y el nuevo informe financiero que dé certeza que se recaudará 3,02% del PIB, que equivale a US$ 8.200 millones.
Este último punto ha sido uno de los principales cuestionamientos que se le han hecho a la reforma tributaria, ya que algunos parlamentarios, economistas y expertos tributarios han manifestado sus dudas sobre si efectivamente se logra el monto proyectado.
Todas estas dudas deberían quedar despejadas cuando el ministro de Hacienda, Alberto Arenas -junto a su equipo técnico- presente las indicaciones junto al nuevo informe financiero que acompañará cada una de las modificaciones.
Según el cronograma de trabajo del presidente de la comisión de Hacienda del Senado, Ricardo Lagos Weber, sostuvo que el informe financiero se conocerá el próximo 4 de agosto cuando se ingresen las indicaciones, ya que ambos documentos se deben elaborar en conjunto.
“El nuevo informe financiero debe indicar cada una de las indicaciones con su respectivo guarismo, es decir, cada cambio que se introduzca debe explicitar con claridad cuando recauda, cuánto se deja de recaudar y cuánto es el neto que queda, porque lo importante es que esta cifra llegue a los US$ 8.200 millones”, sostuvo Lagos Weber.
El senador Andrés Zaldívar (DC) acotó que “la recaudación de los US$ 8.200 millones, el ministro lo va a demostrar que se logra. Eso lo harán los técnicos que conocen este tema y nos tendrá que entregar un informe financiero como corresponde”, dijo. Agregó que obviamente “se tiene que modificar el informe anterior con los nuevos acuerdos que se han llegado, saber por ejemplo, cuánto rinde la tasa de 27%, el crédito de imputación del 65% y ya no el 100% al Global Complementario y cuál es el rendimiento de los impuestos que acompañan la reforma”.
A su turno, el senador Carlos Montes (PS) cuestionó que todavía ad portas de votar el proyecto en general en la sala del Senado no se conozca el detalle del informe financiero. “Espero que llegue para la votación en general en la sala. Eso es lo normal, pero sino ocurre debiera estar a más tardar cuando se inicie la votación en particular en la comisión”, aseveró.
Lo cierto es que para hoy, día en que se vota el proyecto en general en la sala del Senado, es poco probable que el Ejecutivo llegue con el nuevo informe financiero ni las indicaciones.
Para Montes, tras el cambio tributario, un foco de preocupación, sigue siendo los “forados” que el sistema parcialmente integrado dejará. “No está claro si las utilidades reinvertidas serán utilizadas sólo en Chile, o bien se pueden invertir en el exterior. Eso no está claro y debe quedar establecido en la ley”.
La mirada de expertos
Javier Jaque, experto tributario de KPMG y académico de la Universidad de Chile, sostuvo que los problemas de recaudación del gobierno pueden centrarse en el rendimiento recaudatorio de las medidas anti elusión y evasión.
“Se está partiendo de la base que los contribuyente se comportarán de una manera determinada, pero eso no es estático y, por eso, es complejo llegar con una cifra que satisfaga a todas las partes”.
Asimismo, dijo que “tiene que quedar bien definido sobre los controles, de por ejemplo, en qué se va a reinvertir y cómo se va a reinvertir. Faltan detalles todavía de este nuevo mecanismo”.
Jorge Hermann, de Hermann Consultores, planteó como foco de eventual elusión los nuevos parámetros de la renta presunta. Una propuesta para evitar la elusión es otorgar incentivos para que las empresas pasen de renta presunta a 14 ter, ya que una de las limitantes que tenía era un límite bajo”.