La Casa Blanca dijo hoy que el
presidente George W. Bush estaría dispuesto a firmar con rapidez una
extensión de la cobertura del subsidio por desempleo si el Congreso
le envía el texto que está discutiendo por estos días.
Al presidente Bush "siempre le preocupa cuando la gente pierde su
empleo", dijo hoy la portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino, el
mismo día en que se supo que las peticiones semanales del subsidio
por desempleo alcanzó el máximo de los últimos 16 años.
Perino agregó que Bush "está ansioso por ayudar (a los
desempleados) en el alivio de sus dificultades económicas".
El Congreso tiene a discusión un proyecto de ley que extendería
por hasta 13 semanas adicionales el subsidio por desempleo, que
pagan los gobiernos de cada Estado, y que actualmente dura 26
semanas.
Se espera que el Senado vote esta semana un proyecto de ley ya
aprobado por la Cámara de Representantes y que contiene extensiones
del subsidio para aquellas personas desempleadas por más de 26
semanas.
La Casa Blanca había indicado que Bush vetaría un estímulo
económico, por casi US$60.000 millones, presentado por los
demócratas que tienen mayoría en ambas cámaras del Congreso, y que
contiene la extensión del subsidio por desempleo.
Pero ahora, el presidente podría dar su visto bueno al aspecto
concreto de la extensión de las prestaciones, que costará unos US$6.000
millones.
En octubre, el índice de desempleo subió cuatro décimas de punto
y llegó al 6,5%. Desde principios de año, la economía de
EE.UU. ha tenido una pérdida neta de unos 1,2 millones de puestos de
trabajo.
Hoy el Departamento de Trabajo informó que la cifra de
solicitudes de subsidio por desempleo aumentó en 27.000 la semana
pasada y llegó a 542.000, la más alta desde julio de 1992.
El promedio de solicitudes en cuatro semanas, un indicador menos
volátil, subió en 15.750 y llegó a 506.500, el nivel más alto desde
enero de 1983.
La cifra de personas que en la semana terminada del 8 de
noviembre seguían percibiendo el subsidio, pagado por los gobiernos
de los Estados, aumentó en 109.000 y llegó a 4,01 millones, según el
informe.
El promedio en cuatro semanas de las personas que permanecían en
el seguro de paro subió en 71.250 y alcanzó los 3,86 millones.
Mientras que las solicitudes nuevas señalan el ritmo de pérdida
de empleos, la permanencia en el seguro de desempleo muestra cuán
difícil es encontrar un empleo nuevo.