El ministro argentino del Interior,
Florencio Randazzo, aseguró que el oficialismo logrará la aprobación
definitiva de la ley de traspaso de Aerolíneas Argentinas del grupo
español Marsans al Estado, que comenzó a debatir hoy el Senado.
"Yo creo que tenemos los votos necesarios y hoy va a ser un día
importante porque el Parlamento va a terminar de sancionar la ley",
declaró el ministro a radios de Buenos Aires.
El debate del proyecto para nacionalizar la aerolínea de bandera
y su subsidiaria de vuelos domésticos Austral comenzó hoy con 60 de
los 72 miembros del Senado, controlado por el gobernante Frente para
la Victoria, una fracción del peronista Partido Justicialista.
El proyecto oficial, que rechazan las principales fuerzas de la
oposición, convalida el compromiso del Estado de comprar a Marsans
el 94,41 por ciento de Aerolíneas y el 97 por ciento de Austral, a
un valor que deben determinar los organismos públicos de auditoría y
que deberá aprobar en una segunda instancia el propio Parlamento.
La iniciativa ya fue aprobada por la Cámara de Diputados el mes
pasado, con modificaciones pactadas por el oficialismo con el fin de
lograr un mayoritario apoyo en el Senado al proyecto gubernamental.
El senador Gerardo Morales, líder de la opositora Unión Cívica
Radical (UCR), segunda fuerza en el Parlamento, reiteró hoy su
rechazo porque a su juicio el proyecto oficial "obliga al país a
hacerse cargo de los 890 millones de dólares de deuda" de las
aerolíneas.
Reiteró que Marsans ha "vaciado" y "llevado a la quiebra" a
Aerolíneas y Austral.
La UCR, la Coalición Cívica, de centro izquierda, y la alianza
conservadora Propuesta Republicana también cuestionan el sistema
acordado a mediados de julio por Marsans y el Gobierno argentino
para valuar a las compañías en base a flujos futuros de fondos.
La Auditoría General de la Nación ha denunciado que Marsans no
entregó el balance contable de las compañías de 2007, mientras que
el grupo español ha advertido que presentará una demanda ante el
tribunal arbitral del Banco Mundial si no se cumple lo pactado con
el Gobierno argentino.
Como principal cambio al proyecto original, la Cámara de
Diputados ha eliminado un artículo por el que el Parlamento iba a
convalidar un acta de acuerdo firmada por Marsans y el Gobierno
argentino el 17 de julio último.
Ese acuerdo establece que cada parte hará su propia evaluación
para establecer el precio de las acciones y, en caso de desacuerdo,
se recurrirá a un auditor externo internacional cuyo veredicto será
inapelable tanto para Marsans como para el Gobierno.
Según el texto de la iniciativa que debate ahora el Senado, va a
ser un tribunal estatal de cuentas de Argentina el que fijará el
precio de las compañías y la última palabra para aprobar o
desaprobar el valor de la compra la tendrá el Parlamento.
El secretario de Transporte argentino, Ricardo Jaime, ha admitido
la posibilidad de llegar a una expropiación de la empresa en caso de
que Marsans no acepte el precio que aprueben los legisladores.
El director corporativo de Interinvest (Marsans), Vicente Muñoz,
dijo el lunes ante comisiones del Senado que el grupo español
aceptará el precio que fije el Tribunal de Tasación argentino si
coincide con la valoración del Credit Suisse, contratado por la
empresa como consultor externo.
"Si se habla de una expropiación, el precio lo dirá el Estado y
yo acudiré al CIADI (Centro Internacional de Arbitraje de Disputas
de Inversiones del Banco Mundial) o a los organismos internacionales
que considere si me siento mermado en mis derechos fundamentales",
subrayó.