Georgia anunció hoy la ruptura de sus
relaciones diplomáticas con Rusia, a raíz del reciente conflicto
bélico y el reconocimiento por Moscú de la independencia de las
regiones separatistas georgianas de Abjasia y Osetia del Sur.
El Gobierno de Tiflis ordenó al Ministerio de Exteriores romper
las relaciones con Moscú, conforme a la resolución de ayer del
Parlamento que considera a Abjasia y Osetia del Sur como
"territorios ocupados" por Rusia, informó el jefe adjunto de la
diplomacia georgiana, Grigol Vashadze.
"Se ha tomado la decisión definitiva. En el Ministerio hemos
recibido la orden y romperemos las relaciones con la Federación de
Rusia", explicó.
Precisó que mañana Tiflis apartará a todos sus diplomáticos en
Moscú, con lo que modificará su decisión anterior de reducir el
personal de su embajada a sólo dos funcionarios de los más de 30 que
había anteriormente.
"Esta decisión no significa que se suspenden definitivamente los
contactos entre los ministerios de Asuntos Exteriores de ambos
Estados. Tales contactos serán posibles en territorio de terceros
países", matizó el diplomático.
En este sentido, el ministro georgiano para Asuntos de
Reintegración, Temur Yakobashvili, ya había dicho que Tiflis, en
caso de romper las relaciones, mantendría vínculos consulares con
Moscú, posiblemente a través de otros países, para atender los
intereses de los casi un millón de georgianos que viven en Rusia.
En Moscú, nada más conocerse la decisión de Tiflis, el portavoz
del Ministerio de Exteriores, Andréi Nesterenko, declaró que Rusia
lamenta la decisión de Georgia de suspender las relaciones
diplomáticas.
Poco antes, Nesterenko había asegurado que Rusia no quiere la
ruptura y desea "mantener contactos de trabajo por canales
diplomáticos" con el Gobierno georgiano.
"La posible ruptura de las relaciones no es elección de Rusia y
toda la responsabilidad por ello recaerá sobre Georgia", indicó el
diplomático ruso, quien añadió que restablecer los vínculos requiere
"considerables esfuerzos".
Por su parte, el embajador de Rusia en Tiflis, Viacheslav
Kovalenko, anunció que el personal de la misión diplomática está
preparado para abandonar el país caucásico, si se confirma
oficialmente la ruptura de relaciones.