La policía francesa allanó la casa en París de Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional, en una investigación sobre las acusaciones de que ella actuó de forma ilegal al aprobar un pago por 400 millones de euros realizado a un destacado partidario de Nicolás Sarkozy cuando era ministra de Finanzas.
Lagarde ha negado las acusaciones del caso, que se deriva de su papel en un proceso de arbitraje para resolver una acción legal de larga duración de Bernard Tapie, un empresario multimillonario francés, en contra de Credit Lyonnais, un banco de propiedad estatal.
Tapie, quien fuera ministro bajo el presidente socialista François Mitterrand y que apoyó la exitosa campaña presidencial de centro derecha de Sarkozy en 2007, afirmó que el banco lo estafó con la venta de Adidas, la empresa de artículos deportivos de la cual fue dueño durante un tiempo en los ‘90.
En 2008, el panel arbitral concedió a Tapie 285 millones de euros más intereses, pagados por el Estado. Lagarde está siendo investigada por la Corte de Justicia de la República, un tribunal especial que trata las irregularidades ministeriales, bajo sospechas de abuso de poder por no apelar en contra de la cantidad concedida en nombre de los contribuyentes.
En los últimos meses, los investigadores han llevado a cabo una serie de redadas en la casa de Tapie y otras personas involucradas, incluyendo a Stéphane Richard, el director ejecutivo de Telecom Francia, quien fue el jefe de gabinete de Lagarde en aquella época, y Claude Guéant, anteriormente secretario general del Palacio del Eliséo bajo Sarkozy. Yves Repiquet, abogado de Lagarde, dijo a Reuters: “esta búsqueda ayudará a descubrir la verdad, lo que contribuirá a exonerar a mi cliente de cualquier delito penal”.
Hasta la fecha, el caso no ha incidido en el trabajo de Lagarde en el FMI. Un portavoz dijo que Lagarde, quien estaba viajando desde Frankfurt a Washington cuando ocurrió el allanamiento, estaba disponible en cualquier momento para responderle a la policía todas las preguntas en torno a la investigación, que tuvo su inicio en 2011.
El directorio del Fondo Monetario Internacional ha dado todo su respaldo a Lagarde. Esa situación podría cambiar si la corte decide tomar nuevas medidas en su contra, pero Lagarde ha insistido en que ella actuó correctamente en la solución de un caso que le había costado a los contribuyentes franceses un litigio prolongado.