El Parlamento indio aprobó ayer una largamente esperada reforma al fragmentado sistema fiscal para crear un verdadero mercado único, en una de las reformas más significativas a la economía del país desde que comenzó la liberalización hace 25 años.
El proyecto de ley –debatido en Nueva Delhi por cerca de una década– modificará la constitución para permitir la sustitución de una malla de gravámenes nacionales, estaduales y locales por un sistema único de impuestos sobre el valor agregado.
Economistas creen que modernizar el ineficiente sistema de impuestos de India estimulará significativamente la economía, añadiendo potencialmente 1,5 a 2 puntos porcentuales al crecimiento del PIB al año.
“Sin duda va a impulsar la economía, que es tan necesario en este crítico escenario”, dijo el ministro de Finanzas, Arun Jaitley, al Parlamento durante el debate de la enmienda.
El nuevo impuesto sobre bienes y servicios también va a ayudar al primer ministro, Narendra Modi, en su manejo para promover la producción al reducir la pesada carga de impuestos en cascada –o impuesto sobre impuesto– en productos de fabricación local.
“Es un cambio transformador para el país”, dijo Naushad Forbes, presidente de la Confederación de Industrias de India y vicepresidente de Forbes Marshall, que elabora calderas y equipos industriales.
Beneficios de la ley
El nuevo régimen, en el que las compañías pueden reclamar créditos para el impuesto por sus proveedores, también se espera que mejor el cumplimiento, impulsando los ingresos del gobierno en el largo plazo. Grupos industriales dijeron que sería mucho más fácil transportar bienes entre diferentes estados indios que, en el presente, están bajo un desafío burocrático y logístico.
“El empresariado está muy emocionado con esto y añadirá beneficios tremendos a la economía india”, dijo Adi Godrej, presidente del Grupo Gordej, un gran conglomerado de productos de consumo.
Los beneficios también serán bien recibidos por compañías extranjeras, tales como fabricantes de autos japoneses y de Occidente, y marcas entre las que destacan Ikea, H&M, Gap y Zara, que venden a consumidores indios.
La enmienda constitucional fue aprobada por la cámara baja del Parlamento el año pasado pero se encontraba estancada por meses en la cámara alta. Su aprobación unánime ayer puso fin al punto muerto. La cámara baja debe volver a aprobar el proyecto de ley debido a que varios cambios fueron introducidos pero debería hacerse rápidamente, debido a la mayoría que tiene Modi.
Conducir la enmienda a través del Parlamento es un significativo, aunque retrasado, logro para Modi quien llegó al poder hace dos años prometiendo acelerar el crecimiento económico de su país.