Los reguladores japoneses están investigando al Deutsche Bank debido a la posibilidad de que sus empleados hayan quebrantado las normas anti-soborno del país asiático por proporcionar entretenimiento corporativo a ejecutivos de fondos de pensiones.
La Comisión de Valores de Japón (SESC), el regulador del mercado, está investigando si los miembros del grupo de soluciones de pensiones de Tokyo del banco gastaron demasiado dinero para entretener a sus clientes.
Los administradores de fondos de pensiones están involucrados en la gestión de plan de pensiones nacional de Japón, y legalmente se presentan como funcionarios públicos.
En tanto, Deutsche Bank aseguró que está “colaborando totalmente” con los reguladores japoneses.
Fue el mismo banco que manifestó este año su preocupación al organismo regulador, luego de realizar una revisión interna de sus procedimientos.
Las irregularidades examinadas, cuyos detalles no fueron revelados, se llevaron a cabo años atrás.
“Deutsche Bank está comprometido a cumplir con las normas estrictas de cumplimiento de la política y la regulación bancaria”, dijo la compañía en un comunicado. “Si se comprueba la conducta impropia, lo abordaremos de manera responsable y tomaremos las medidas apropiadas.” La SESC no pudo ser contactada inmediatamente para emitir comentarios.
Los reguladores en Japón siguen de cerca la actividad de fondos de pensiones después del escándalo en 2012, cuando Tokio inversores AIJ Investment Advisors admitieron la cobertura de pérdidas por US$ 1.300 millones en dinero de las pensiones de sus clientes.
Según expertos, estos últimos movimientos pueden ser una señal de que el regulador japonés busca ponerse al día con las normas más estrictas en EEUU y Europa en materia de hospitalidad corporativa y el soborno. Los reguladores de Estados Unidos han intensificado el escrutinio de los casos de soborno de Asia.