Por R. Atkins y K. Fray,
Londres
El cambio en la confianza de los inversionistas en los mercados bursátiles globales se ha acelerado este año con la ampliación de la brecha entre el valor de mercado de los grandes bancos estadounidenses y las empresas de commodities en los mercados emergentes.
Hace cinco años, justo antes del colapso del banco de inversiones Lehman Brothers, la capitalización de los bancos de EEUU cayó por debajo del valor de las empresas de energía, materiales y minería de los países BRIC: Brasil, Rusia, India y China.
El cambio parecía subrayar el cambio en el poder económico global y el alza de las economías de rápido crecimiento más allá de Norteamérica y Europa occidental.
Pero ahora la confianza de los inversionistas se revirtió nuevamente. A fines de la semana pasada la capitalización de los bancos estadounidenses -que superó US$ 1 billón (millón de millones) por primera vez desde noviembre de 2007- más que duplicó la de las empresas de energía y materiales de los BRIC, que fueron valoradas en US$ 432 mil millones, según cálculos de Financial Times.
A principios de año, el valor de los bancos de EEUU era sólo 1,5 veces el de las compañías BRIC. Bank of America Merrill Lynch calculó la semana pasada que la capitalización de mercado de Wells Fargo y JPMorgan de
US$ 440 mil millones superaba la de todas las firmas de energía y materiales de los BRIC
(US$ 420 mil millones).
“Si uno se está moviendo de un ambiente como el de Japón, de bajas tasas de interés y crecimiento económico, y los próximos cinco años serán sobre normalización y crecimiento, para lo cual se necesita crédito, entonces los bancos van a ser los ganadores en ese mercado”, afirmó Michael Hartnett, estratega de inversiones jefe de BofA Merrill Lynch. “Para ese mundo, son buenas noticias que el sistema bancario de EEUU esté mejor. La implicancia es que la economía estadounidense, y particularmente el mercado inmobiliario, están mejorando”.
Los sectores de minería y energía de los BRIC incluyen a empresas como la brasileña Petrobras y la rusa Rosneft, además de la brasileña Vale, el mayor exportador mundial de mineral de hierro.
El sector ha sido golpeado por la caída en los precios del oro y otros commodities, además de crecientes costos de producción de energía. Sin embargo, el resurgimiento de la importancia de los bancos de EEUU podría generar preocupaciones sobre un regreso a la economía global impulsada por el crédito pre-2008, y que la valoración del sector financiero haya sido impulsada artificialmente por el actuar de los bancos centrales globales para estimular a las economías a través de la compra de activos.
Desde principios de año, el índice de mercados emergentes MSCI ha caído 9,6%, mientras que el S&P 500 ha subido 27%.