La recuperación de la zona euro se frena en agosto por deterioro en Francia e Italia

Aumentan las dudas sobre la recuperación de la zona euro. El índice PMI de actividad señala un frenazo en la reactivación en agosto por el deterioro de Francia e Italia.

En concreto, el índice se ha situado en los 52,5 puntos, frente a los 53,8 puntos de julio. Si se sitúa por encima de los 50 puntos significa que hay expansión en el sector, pero este último dato indica el ritmo más débil en lo que va de año y el peor dato en ocho meses.

Markit señala que se ha moderado tanto la producción del sector manufacturero (que ha crecido al ritmo más lento en catorce meses) como la del sector servicios (el más débil desde junio pasado). En el lado positivo ha destacado el comportamiento de Irlanda y España, mientras que Italia y Francia se adentran en la contracción.

Además, la creación de empleo se ha desacelerado hasta casi el estancamiento en agosto. "En Alemania y España la dotación de personal aumentó, pero en Francia e Italia disminuyó", añade.

Chris Williamson, economista jefe de Markit, destaca que estos datos meten presión al BCE (que se reúne mañana) para actuar hacia una flexibilización cualitativa a gran escala. "Sin embargo, es probable que sea demasiado pronto para ver algo más que una retórica más firme del BCE, a medida que los responsables de la política monetaria dan más tiempo para que las medidas anunciadas previamente entren en vigor, en particular las operaciones de financiación a plazo más largo con objetivo específico", explica.

Williamson añade que las tensiones en Ucrania están teniendo un claro impacto en la confianza, reduciendo el gasto y la inversión empresarial.

"Los datos del PMI se suman a la opinión de que, si los gobiernos no toman medidas contundentes para impulsar la competitividad y la productividad, el rendimiento económico seguirá siendo decepcionante, incluso con nuevas medidas del BCE", concluye.

En el segundo trimestre, el PIB de la zona euro ya se estancó, con una contracción de la economía alemana y de la italiana y un frenazo de la francesa, lo que hizo saltar las alarmas hace unos días en la región.