Por M. Apablaza y P. Valenzuela
Para apoyar el desarrollo de proyectos de alta tecnología en etapas tempranas, Corfo lanzó por segundo año el concurso Alta Tecnología. Un certamen dirigido a medianas y grandes empresas, que busca poner énfasis en el apoyo a investigaciones de larga data, mayor tamaño y complejidad.
“Este año recibimos 18 postulaciones en comparación con la primera ronda, donde tuvimos 14. Esto es una buena señal porque es un instrumento nuevo. Tenemos la sensación de que vamos por buen camino”, asevera Conrad Von Igel, director ejecutivo de InnovaChile de Corfo.
Los proyectos presentados involucran una inversión total en torno a los $ 6.700 millones, de los cuales $ 3.000 millones los aportará la estatal. En el detalle, cada proyecto demandará una inversión cercana a los US$ 2 millones en cinco años, de los cuales Corfo subsidiará
US$ 1 millón.
“En este concurso, más que en ningún otro instrumento, Corfo participa como socio debido a que la institución financia hasta el 50% del proyecto y requiere que la empresa ponga el otro 50%”.
“La selección es muy rigurosa”, señala Von Igel. “Tenemos una tasa de aprobación de 38%. Sólo 12 proyectos, de los 32 que postularon en ambas rondas, fueron seleccionados, lo que es señal de lo exigente que es el concurso y del buen nivel de las empresas ganadoras”.
Por otro lado, indica que este subsidio es compatible con la Ley I+D. “Por lo tanto, el 50% de financiamiento que pone la firma se puede deducir de impuestos.”
Von Igel sostiene que el concurso nació para cubrir la necesidad de financiar proyectos de investigación y desarrollo largos y complejos que no se estaban apoyando.
“Desde el punto de vista de la política pública se podía decir que estábamos induciendo un sesgo ya que no teníamos un instrumento que financiara, por ejemplo, propuestas en el área de biomedicina o energías renovables que requieren de mayor tiempo de investigación por su complejidad”, precisa.
La mayor parte de las 18 postulaciones recibidas, proviene de áreas como acuicultura, industria farmacéutica, minería o tecnologías de la información, hasta energías renovables y selección genética.
Desafíos a nivel global
Von Igel afirma que una de las metas del Programa de Alta Tecnología es que las innovaciones alcancen mercados globales.
“El tipo de proyecto que apoya el programa es muy disruptivo. La idea es permitir a las empresas competir a nivel global. Si estos desarrollos estuvieran pensados para el mercado local, serían muy caros”. Agrega que “esta mirada global es importante porque la innovación y la productividad de las economías está basada, justamente, en ser capaces de competir en el mundo”.
Semameris: semillas de camelina enriquecidas
A través de este proyecto, la empresa busca obtener variedades innovadoras de camelina, con un alto contenido de aceite, permitiendo la producción y obtención de bioqueroseno de uso aeronáutico, con un elevado punto de congelación y baja estabilidad oxidativa. "Esperamos obtener una variedad de semilla de "camelina enriquecida", patentada, que será comercializada a nivel nacional e internacional. Al fomentar el uso de biocombustibles, se disminuirá la emisión de gases de efecto invernadero (CO2)", indica Benoît Moreau, research manager en Semameris.
El objetivo es ocuparlos en diferentes subproductos para obtener un bioqueroseno JET A-1 y mejorar el rendimiento y vida útil de los motores de los aviones. La inversión total es de $ 1.184 millones y $ 580 millones son aportados por Corfo.
Clínica Las Condes: centro de células
Hace tres años, Clínica Las Condes se adjudicó un primer proyecto de biotecnología para la creación de un centro de terapia celular e ingeniería en tejidos, que realiza terapia celular autóloga, es decir, con las propias células del paciente. Sin embargo, sólo cubría algunas patologías. Para ampliar la cobertura, desarrollaron un segundo proyecto, el primer centro de células heterólogas para uso en distintas áreas de terapia celular de enfermedades agudas.
La iniciativa, demanda inversiones por $ 1.652 millones, de los cuales $ 687 millones serán aportados por Corfo. "El objetivo es que una vez terminado, el centro sea capaz de abastecer a toda Latinoamérica de un producto específico de células madres expandidas para uso en diferentes patologías y que sean beneficiarias de este tratamiento", explica Rodrigo Mardones, director del proyecto y del Laboratorio de Ingeniería de Tejidos de CLC.
Ecotecnos: suelos libres de contaminación
Para enfrentar la contaminación de suelos con hidrocarburos con presencia de toxinas, la empresa Ecotecnos busca desarrollar un producto para su biorremediación, el que estará basado en el uso de microorganismos degradantes de hidrocarburos, suplementados con enzimas.
"Esperamos generar una solución, con un costo eficiente, que permita a todos aquellos que poseen determinados pasivos
medioambientales, acceder a una innovadora manera de recuperar los suelos contaminados y así, posicionar una oferta única a la hora de enfrentar estos problemas", señala Italo Andreani, gerente comercial de Ecotecnos.
El proyecto, uno de los seis ganadores de la convocatoria, considera una inversión total de $ 433 millones, de los cuales Corfo aportará $ 191 millones.
Tecnología médica de nivel internacional
Levita Magnetics está desarrollando dispositivos para realizar cirugías que utilizan campos magnéticos como plataforma tecnológica, condicionando un menor número de incisiones, con lo cual se maximizan los beneficios de la cirugía. El costo del proyecto es de $ 1.649 millones, con un aporte de Corfo de $ 708 millones.
"Para el paciente se traduce en un mejor resultado estético (menores cicatrices), menor dolor y una recuperación precoz. Somos la primera empresa chilena en desarrollar instrumental quirúrgico de nivel internacional", explica Alberto Rodríguez, fundador de Levita Magnetics. El proyecto consiste en validar la tecnología, mediante ensayos clínicos, para tener el nivel FDA. Rodríguez explica que de esta forma "una tecnología originada en Chile será capaz de mejorar la práctica médica a nivel mundial".
SACYR CHILE: asfalto sustentable
El proyecto "PASOS - Investigación y desarrollo de nuevos pavimentos asfálticos sostenibles de baja temperatura y recicladas", tendrá una inversión total de $ 660 millones, de los cuales $ 320 millones serán aportados por Corfo.
La propuesta de Sacyr Chile, busca diseñar y desarrollar: mezclas sostenibles; nuevas tecnologías de fabricación; un ligante y una forma de construir y rehabilitar los pavimentos de las carreteras a un costo inferior.
Además de los ahorros monetarios, esperan reducir entre 25%-50% la emisión de gases de efecto invernadero (CO2); emplear material reciclado y mejorar las condiciones de los trabajadores por la ausencia de humos y riesgos de quemaduras. "El proyecto forma parte de una de las líneas estratégicas de la empresa", explica Salvador Gabarró, gerente técnico de Sacyr Chile.
Nuevos fármacos para uso veterinario
Este proyecto trabaja en el desarrollo y aplicación de tecnología de micro y
nanoencapsulación para ser aplicada al desarrollo científico de nuevos medicamentos, en base a consideraciones de propiedades biofarmacéuticas, físicas, químicas y biológicas. "Este desarrollo permitirá formular nuevos productos y formas farmacéuticas de liberación controlada de fármacos y antígenos de uso veterinario para satisfacer nuevos requerimientos de inocuidad alimentaria en producción animal", explica Samuel Valdebenito, gerente de Investigación y Desarrollo en Veterquímica.
Una ventaja de estos productos es su optimización de acción farmacológica y mejoramiento del perfil terapéutico disminuyendo los efectos adversos. El monto de inversión total será de $ 1.153 millones de los cuales $ 470 millones son aportados por Corfo.