Mientras veían el rescate de los 33 mineros en 2010, Oscar Silva y su hijo Mauricio se preguntaron si existía una tela que ayudara a prevenir enfermedades y contagios.
Así nació en Valparaíso, la empresa Coure (cobre en catalán), que tras tres años de desarrollo crearon CoureTex, una tela manufacturada con hilos de cobre con capacidades anti bacterianas y anti gérmenes, y que cuya técnica de elaboración está en proceso de patentamiento en países del continente.
“CoureTex contiene, al menos, un 35% de cobre en su composición y puede alcanzar el 80% dependiendo del requerimiento”, explica Mauricio Silva, gerente general de Coure. Agrega que los otros productos que existen en el mercado, “emplean una técnica en la cual a las fibras se les aplica un baño con óxido de cobre (que usa sólo 1% del metal rojo), lo que provoca que pierdan sus propiedades antibacterianas con los meses de uso”.
Para lograrlo, tuvieron que diseñar máquinas especiales que pudieran “tejer” hilos de cobre en diferentes telas. Y este año, obtuvieron
$ 25 millones de Corfo para certificar sus características antibacterianas, difusión y crecimiento.
La tela tiene múltiples aplicaciones, ya sea para confeccionar vestuario, ropa de cama en clínicas hasta en mascarillas, antiparras o productos que necesiten mantenerse libre de gérmenes.
Actualmente, están en plena fase de comercialización del producto.
“Este año, queremos alcanzar un volumen de 1,5 toneladas de CoureTex. Para 2015, queremos ser reconocidos como el productor de telas inteligentes de cobre y llegar a producir diez toneladas”, comenta. También están elaborando productos, como cubiertas de respaldos de automóviles, cubiertas de almohadas o guantes.