La electricidad de origen nuclear es la más barata en la
producción, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE) y la Agencia de
la Energía Nuclear (AEN), que matizan que tanto la generada en las centrales
térmicas de carbón o de gas como la de las plantas eólicas son igualmente
competitivas.
"Ninguna tecnología de producción de electricidad puede
pretender ser la menos cara en todas las situaciones", subrayan la AIE y
la AEN en un estudio publicado hoy en el que señalan que la competitividad de
una u otra va a depender de los costos de financiación, de los precios de las
materias primas y las emisiones de carbono y de la normativa de política
energética en cada país.
En cualquier caso, con los criterios fijados por el estudio
-que por primera vez incluye un costo de 30 dólares por la emisión de cada
tonelada de dióxido de carbono (CO2)- la electricidad nuclear es la más barata
en las tres regiones analizadas (Norteamérica, Europa y Asia-Pacífico).
Estados Unidos
En Norteamérica la nuclear supone un poco menos de US$ 50 por
megavatio, frente a los algo más de US$ 60 de media de las instalaciones
eólicas, de los algo más de US$ 70 (también de media) para las centrales
térmicas de carbón y de los poco más de US$ 80 de las térmicas de gas.
Asia
En Ásia-Pacífico la nuclear es todavía más barata, con menos
de US$ 35 por megavatio, comparados con los algo más de US$ 60 del carbón, los
casi US$ 70 de la eólica y los alrededor de US$ 85 del gas.
Europa
La atómica representa en Europa unos US$ 60 de media por
megavatio, frente a los US$ 80 del carbón, los US$ 90 del gas y los US$ 120 de
la eólica terrestre.
Esos resultados "varían enormemente de un país a otro,
incluido dentro de la misma zona geográfica", advierten los autores del
documento, que también señalan "una cierta incertidumbre".