Quiénes son los titanes de la energía que se disputan la megalínea eléctrica que unirá Antofagasta y Santiago

El misterio ya está resuelto. A casi un año del lanzamiento oficial del llamado a licitación para la construcción de la megalínea Kimal-Lo Aguirre, obra de transmisión en corriente continua (HVDC) que unirá Antofagasta y Santiago con una inversión de US$ 1.480 millones, son dos consorcios los que disputarán su adjudicación. El resultado ya despertó los análisis en la industria sobre el perfil de los participantes, sus posibilidades, pero también los riesgos que pueden surgir en el camino. 

¿Quiénes son los los dos consorcios en carrera? Uno de ellos se denomina "Yallique" cuyo proponente es CSGI HK, el que está conformado por tres empresas: ISA Inversiones, Transelec y China Southern Power Grid International HK. Fuentes comentan que desde hace varios meses que estaban trabajando la presentación de la oferta que fue acompañada por al menos 450 documentos.

ISA, cuya filial local de la colombiana es Interchile, es un viejo conocido en el país, ya que impulsó la megalínea Cardones-Polpaico, que une Atacama con la Región Metropolitana, la que es considerada como la obra más grande construida en el país a la fecha. Sin embargo, en el camino tuvo diversos postergaciones en sus plazos de su construcción, lo que derivó incluso que actualmente esté en un arbitraje con el Estado de Chile en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), por las millonarias multas que le fueron aplicadas por los retrasos.

China Southern Power Grid International HK se convirtió en un nuevo actor en el sector energético local en 2018 al ingresar a la propiedad de Transelec, la principal firma de transmisión en Chile, tras comprar el 27,7% al fondo canadiense Brookfield Infraestructure Partners. 

Si bien China Southern Power Grid International HK es uno de los cuatro accionistas de Transelec, los asiáticos participan en este consorcio como oferentes. La razón está en que las bases de licitación exigían que los participantes tuvieran experiencia en el desarrollo de líneas HVDC y ese requerimiento no lo cumplía Transelec a pesar de formar parte de la propiedad. Así, se sumó la china para agregar valor a la propuesta en esta tecnología de corriente continua.

La asiática tiene diversas líneas HVDC en las provincias del sur de China. ISA también tiene una experiencia en Brasil donde desarrolló una línea de más de 2.000 kilómetros que en su momento fue la más larga del mundo en tecnología HVDC. 

Transelec, que tiene 70 años de experiencia en líneas de transmisión en Chile, tendrá el liderazgo en la vocería del consorcio. 

En un comunicado, el gerente general de Transelec, Andrés Kuhlmann, indicó que reafirman su "compromiso férreo con el cuidado medio ambiental y con el respeto a las comunidades cercanas al proyecto, el cual desarrollaremos siempre con total transparencia y un espíritu dialogante con nuestros vecinos".

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Arremetida española con Iberdrola a la cabeza

Pero el segundo contendor en poner su oferta en la mesa también goza de experiencia. Se trata del consorcio Meval formado por Iberdrola Redes España (60%) y Celeo Redes Chile. La primera ha incursionado en la tecnología HVDC desde hace años. En 2018 llamó su atención la línea que buscaba conectar a Baja California con el resto del país que involucra una inversión de US$ 1.100 millones.

"De resultar ganadora, Iberdrola iniciaría su actividad en una nueva plataforma de crecimiento internacional, Chile, después de reforzar en el último año y medio su posición en mercados core y entrar en otros países europeos y de Asia Pacífico", dijo en un comunicado.

Esta es un gigante euopeo, que tiene más de 55 mil MW de capacidad instalada de generación eléctrica y más de un millón de kilómetros en líneas de transmisión.

Mientras, Celeo también de origen español, tiene presencia en Chile desde 2010 mediante la adjudicación de su primer proyecto, la línea Ancoa-Alto Jahuel 2x500 kV. Un año después se constituye oficialmente el holding Celeo Redes Chile Limitada. Según se consigna en su última memoria publicada correspondiente a 2019, aporta con una longitud de líneas por circuito de 835 kilómetros cuadrados, lo que corresponde al 2,4% de las líneas de transmisión a nivel país, ubicándose en el onceavo lugar.

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El análisis que se abre en la industria

La llegada de solo dos propuestas cuando se conocía el interés de alrededor de 18 firmas en el proceso sorprendió a la industria. Los diversos aspectos regulatorios que está enfrentando el segmento de transmisión, marcado por el resultado del proceso de valorización de sus activos que lideró la Comisión Nacional de Energía (CNE), habría obligado a repensar el mapa de riesgos de las firmas. 

Este último aspecto habría gatillado incluso la baja de la francesa Engie de un consorcio que conformaba con la española Acciona y Korea Electric Power Corporation (KEPCO). Fuentes comentan que los desafíos que impone la construcción de esta megalínea son considerables. Las bases de licitación dan hasta el año 2029 para la construcción, lo que ya es un plazo exigente considerando los retos que implica levantar este tendido, y los ingresos solo se verán a partir de la puesta en servicio.

Sin embargo, de cara a la apertura de ofertas económicas del proceso que se realizará el 6 de diciembre, algunos actores ya advierten la posibilidad de que pueda quedar desierta la licitación por el precio de reserva. Según explican actores, si las empresas están por encima de ese techo, lo que es altamente probable al considerar en los precios los diversos riesgos presentes (regulatorios, congelamiento de tarifas, amenaza de atrasos, entre otros), podrían no ajustarse a ese valor.