Al filo de las 11 de la mañana -hora fijada para el inicio de la sesión-, el presidente Sebastián Piñera era recibido por los presidentes del Senado, Adriana Muñoz (PPD) y de la Cámara, el RN Diego Paulsen, quienes dieron cuenta al país de la actividad de las respectivas corporaciones, por sexta vez.
Ello desde que el expresidente de la Cámara Alta, Patricio Walker (DC), impulsara esta iniciativa como un deber de las más altas autoridades del país, siendo el mismo el primero en ponerla en práctica, el año 2015.
Ambas autoridades optaron por no eludir la contingencia. La presidenta de la Cámara Alta fue la segunda en intervenir y lo hizo iniciando con un discurso muy político, que luego dio paso a un detalle del trabajo del Senado, especialmente, desde marzo, en el marco de las adecuaciones que se debió realizar para seguir sesionando.
Iniciativas históricas
En este aspecto, Muñoz detalló que en estos casi cinco meses, se han desarrollado 47 sesiones de Sala, "con un promedio de asistencia altísimo de 41 senadoras y senadores" y durante el cual se han despachado –apuntó- 85 proyectos de ley, un acuerdo internacional y siete acuerdos de otro tipo. La senadora subrayó que entre estos proyectos se han aprobado 25 vinculados específicamente con la pandemia. "Aporte que ha sido destacado por el propio Ejecutivo y que echa por tierra acusaciones ocasionales de obstruccionismo", enfatizó.
En este contexto, la senadora comenzó a adentrarse en las materias que no sólo provocaron la crisis al interior del oficialismo; sino también una fuerte tensión entre los poderes Legislativo y Ejecutivo. De hecho, en los pasillos del Congreso se comentaba que justamente la asistencia del mandatario a esta actividad apunta a dar señales de normalidad a esta relación.
Sin embargo, Adriana Muñoz no pudo dejar pasar la oportunidad de enrostrarle al jefe de Estado el triunfo político de la oposición, que significó la aprobación de proyecto de retiro de fondos y el rechazo del veto al de servicios básicos.
"No puedo dejar de mencionar dos iniciativas legislativas, surgidas desde el Congreso Nacional, que han sido aprobadas horas atrás por mayorías históricas: el proyecto que permite a los afiliados a las AFP retirar hasta un 10% de su ahorro y el que impide que las empresas proveedoras de servicios básicos corten su suministro por razón de no pago", señaló la presidenta del Senado, provocando la incomodidad del mandatario.
Al respecto, Muñoz argumentó que estas iniciativas surgieron "como respuesta a la dramática situación que viven miles de familias y que expresan los anhelos profundos de la gran mayoría de las chilenas y chilenos, por vivir en un país menos desigual, más justo, sin abusos, con pleno respeto a los derechos de todas y todos, sin odio y sin violencia".
Sin embargo, añadió que su aprobación "mucho más que una derrota política para el gobierno o la reivindicación de las atribuciones del Parlamento frente al Ejecutivo, es una manifestación clara de que los representantes de la ciudadanía han recogido ese clamor amplio y profundo de sus comunidades, eso es lo que explica su apoyo tan transversal".
Y que con la aprobación de estos proyectos, los parlamentarios además de sintonizar con la ciudadanía, demostraron que el bien común puede y debe estar por sobre los intereses económicos de cualquier sector", con lo que se ganó el aplauso de los pocos presente en la sede del Congreso y de los senadores de su sector que seguían la ceremonia –que se prolongó poco más de una hora- por la vía telemática.
Colaboración con el Ejecutivo
En tanto, el presidente de la Cámara Diego Paulsen (RN), destacó en su recuento que ningún país ha enfrentado la magnitud de la crisis que ha vivido Chile, a partir del estallido social del 18 de octubre, seguido por la pandemia y "la gran recesión económica", provocada por las dos anteriores.
"Hoy, luego de casi 4 meses, doy cuenta como presidente de una mesa integrada por distintas corrientes políticas que representan a nuestro Congreso. Y en donde me he esforzado por garantizar los espacios de debate, respetar los derechos de cada diputada y diputado y que cumplamos con la Constitución", señaló Paulsen, añadiendo que en momentos como los que atraviesa el país "debemos demostrar que estamos a la altura de la historia".
Respecto de la labor de la Cámara en el contexto de pandemia, destacó que se ha realizado más de 345 sesiones de comisiones permanentes e investigadoras y "un sin número de sesiones de Sala" en la modalidad telemática y presencial.
Asimismo se han implementado sistemas tecnológicos, desarrollados por los propios funcionarios de la Corporación -como la aplicación de teléfono para votar de forma remota, con lo que se han realizado más de 244 votaciones a distancia-; se ha digitalizado la oficina de partes, recibiendo más de 70 mociones y 83 proyectos de acuerdo y resolución de forma remota; y, se implementó la Plataforma de Oficios de Fiscalización, que permite digitalizar estas comunicaciones con el Ejecutivo, lo que permite –dijo Paulsen- una comunicación más eficiente entre los Poderes del Estado.
También destacó que se ha fomentado la participación ciudadana con la plataforma Congreso Virtual -algo sobre lo que también hizo hincapié la presidenta del Senado-, que está regulado por un reglamento.
Asimismo, el presidente de la Cámara destacó que durante el año de que dio cuenta se logró balancear la agenda legislativa entre los mensajes del Presidente de la República y las mociones de los parlamentarios, con lo que de las 100 leyes publicadas durante este año, 55 son mociones. Y enfatizó que si bien la Cámara tiene "un ánimo de colaboración absoluta con el Ejecutivo, pero sin ser un buzón", tras lo cual también destacó la disposición mostrada por su corporación de contribuir al ahorro fiscal, disminuyendo su presupuesto. E hizo hincapié en el ánimo del Congreso a colaborar a realizar un plebiscito en el ambiente de pandemia, para lo que se creó una mesa con el Senado, que trabaja en ello.
Polémica por admisibilidad de proyectos
Paulsen tampoco dejó pasar los problemas que se han generado con el Ejecutivo a raíz de los proyectos inadmisibles.
"Lamentablemente, en el contexto de la crisis sanitaria y social, hemos sido testigos de iniciativas parlamentarias que, quizás bien intencionadas, contravienen nuestro orden constitucional. Ello es grave, toda vez que en una democracia el respeto a las reglas del juego es fundamental, lo que se vuelve particularmente importante en lo que se refiere a las relaciones entre poderes del Estado", advirtió, añadiendo que algunas de las iniciativas que han generado polémica con el Ejecutivo "han sido impulsadas con afanes que se alejan de la debida prudencia", lo que afecta –a su juicio- la imagen del Congreso.
Y añadió que "en tiempos difíciles la responsabilidad debe ser un imperativo inclaudicable, y la percepción de impopularidad no nos debe llevar a eludirla".
El desafío de La Araucanía
El presidente de la Cámara, representante de La Araucanía en el Congreso, también abordó la situación en la zona, sin eludir la responsabilidad que tiene el gobierno en la falta de soluciones para la violencia que ha aumentado en la región.
"Soy diputado por La Araucanía, y sin dobleces puedo decir que el Estado chileno está absolutamente al debe con mi región. En todo sentido"; no obstante, también se dirigió a quienes –desde su punto de vista- han sido "ambiguos frente a la violencia: el Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución incluía también condenar la violencia a todo evento y en esto creo hay un desafío político pendiente".
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