Grandes empresas son las más preocupadas por eventual recesión a nivel interno
El temor por un empeoramiento del panorama económico avanzó de un 27% a un 43% entre las firmas de mayor tamaño.
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Por Patricio Ojeda González
Un generalizado deterioro de las expectativas respecto a una recesión expresaron las grandes empresas consultadas por la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) para la elaboración del Índice de Expectativas Empresariales (IEE) que trimestralmente realiza el gremio.
En las grandes empresas los temores de una recesión se empinaron hasta un 43%, desde un 27% en marzo, lo cual refleja un estado de mayor pesimismo que el existente en las pequeñas empresas.
En efecto, en las empresas de menor tamaño el aumento entre marzo y junio último ha sido más leve, de 35% a 37%, los cual es coherente con la menor exposición a los mercados externos que presentan las empresas de menor tamaño.
Esta nueva caída del IEE es consistente con la
desaceleración que se espera para el crecimiento del segundo semestre del año. “Las estimaciones de la CCS apuntan a una expansión del Imacec de 4% en el último trimestre del año, pero no es descartable que pueda incluso crecer en torno a un 3,5% solamente”, afirman desde el gremio.
El deterioro en el sentimiento de negocios también fue generalizado en los distintos tamaños de empresas, pero particularmente pronunciado en las grandes, en las que se produjo un descenso de 10 puntos, desde 72 puntos en marzo 2012 a 62 puntos en junio.
En las medianas empresas la caída fue de 8 puntos en el mismo período, desde 68 puntos a 60 puntos y; en las pequeñas, de 4 puntos, de 68 puntos a 64 puntos.
Cifras globales caen 5 puntos
En general, el IEE reanudó su tendencia declinante, al retroceder 5 puntos, desde 69 puntos en marzo último a 64 puntos en junio. Se completaron así prácticamente seis trimestres consecutivos de descenso en la percepción de optimismo empresarial, transitoriamente interrumpido con un leve repunte en marzo de 2012.
“En el informe anterior anticipamos que la recuperación de marzo denotaba cierta fragilidad, lo que aparece más claro ahora en junio con el nuevo retroceso de 5 puntos. El análisis de las cifras sugería entonces que la recuperación del índice era más bien una reacción al inesperado buen crecimiento económico del primer trimestre y al alivio aparente que mostraba la crisis de la deuda de la zona Euro, relacionadas con la distensión por el default en Grecia”, explican en la CCS.
El IEE observado en esta oportunidad representa un descenso de 14 puntos en relación al máximo alcanzado en diciembre de 2010 (78 puntos). En todo caso, pese al sostenido retroceso, las expectativas empresariales permanecen en la zona de optimismo, cuyo límite base está marcado en los 50 puntos. Como referencia, a fines de 2008, en plena crisis subprime, el índice cayó a 45 puntos.
Inestabilidad externa, la principal preocupación
En los aspectos que preocupan a las empresas la inestabilidad externa es un elemento central, ya que prácticamente una de cada tres firmas declara que es el aspecto más inquietante en la coyuntura actual. “Chipre se ha convertido en la quinta economía en solicitar un rescate financiero, y las clasificadoras de riesgo internacionales están abocados en una degradación masiva de bancos europeos, buscando no ser de nuevo meros espectadores de una crisis bancaria abierta en la zona Euro. Las reclasificaciones de muchos bancos están al borde de los bonos basura, plasmando una seria interrogante acerca del futuro desarrollo de la crisis europea”, plantea el informe del gremio.
El análisis de los resultados por sectores de producción muestra un panorama similar. Todos los sectores, sin excepción, recortaron su IEE. El que mostró la menor caída fue Construcción, con un recorte de 5 puntos y el mayor pesimismo fue Transportes, con un recorte de 11 puntos.
Respecto a la percepción de las condiciones económicas generales para los próximos 12 meses, se aprecia un descenso importante en aquellas que apuestan por una mejoría.
En la actualidad, un 32% de las empresas prevé una mejoría a un año plazo, porcentaje que llegaba al 49% en marzo último. Por lo mismo, las que esperan ver un empeoramiento prácticamente se triplicaron, al pasar de 7% en marzo a 19% en junio.
Ventas, inversiones y empleo
En términos de ventas, empleo e inversiones futuras, se observa un leve declive en el optimismo. Las empresas prevén un aumento de 10,5% en sus ventas en los próximos 12 meses, inferior al 12,4% registrado en marzo último. Un 40% de los encuestados espera que las ventas se mantengan, en tanto que sólo un 3,5% espera ver disminuciones en los próximos doce meses.
En materia de inversiones programadas, se aprecia una nítida tendencia a moderar las expansiones registradas en los trimestres anteriores. El crecimiento esperado a 12 meses marcó un 5,1%, en lugar del 7,2% de marzo último.
El empleo también muestra una moderación en su comportamiento esperado a un año. La expectativa de contratación laboral cayó levemente a 3,1%, desde un 3,4% en marzo. Esta expectativa de creación de empleo es la más baja de los últimos doce trimestres.