Pocas, muy pocas, alternativas tiene el gobierno para incorporar la titularidad sindical y la extensión de beneficios por afiliación al sindicato en la legislación laboral y, de paso, cumplir con dos promesas de campaña. Una, es modificar el inciso quinto del artículo 19 N°16 de la Constitución, estableciendo que la negociación colectiva es un derecho que los trabajadores ejercen a través del sindicato. Otra es “reinterpretar” el mismo precepto, utilizado por el Tribunal Constitucional (TC) para derribar dos pilares de la reforma laboral.
Ambas salidas, una reforma constitucional y una ley interpretativa, ganan terreno al interior de la Nueva Mayoría, donde incluso ya han presentado proyectos ad hoc en el Congreso. Sin embargo, el gobierno las descartó “por la falta de votos”, ya que la primera requiere de la aprobación de 2/3 del Congreso, mientras que la segunda de 3/5. La Moneda también
desechó la idea de suspender la tramitación del proyecto, como lo han solicitado legisladores de la DC y el PPD.
Así lo comunicó ayer el Ejecutivo a los presidentes de los partidos de la NM, en el comité político en La Moneda.
El presidente de la Cámara de Diputados, Osvaldo Andrade, destacó esta decisión y, de paso, cuestionó la reforma constitucional presentada por senadores de la DC, asegurando que “no establece la titularidad claramente y ‘constitucionaliza’ los grupos negociadores, lo que es un error político”.
También negó que la reforma laboral tenga “más retrocesos que avances”, como lo piensa parte importante del mundo sindical y un sector de la Nueva Mayoría.
“En este proyecto logramos pisos mínimos, huelga efectiva, que no haya reemplazo, cuotas de género, es decir, el avance es significativo. No es todo lo que quisiéramos, pero éstas son peleas largas”, expresó el diputado socialista.
Gobierno mantiene la incertidumbre
Lo que aún no resuelve el gobierno es el mecanismo que utilizará para “equilibrar” nuevamente la reforma laboral, ahora sin el pilar de fortalecimiento sindical. La razón es que los ministerios del Trabajo, Hacienda y la Secretaría General de la Presidencia aún no alcanzan una “convicción jurídica” y mantienen distintas interpretaciones sobre el fallo del TC, lo que han intentado superar encargado distintos estudios a abogados laboralistas, donde el consenso tampoco existe.
Lo que sí va adquiriendo el Ejecutivo y la NM es conciencia que el fallo del TC “deja poco o nulo espacio” para la titularidad sindical.
“Hay muchos temas que no vamos a poder salvar con el veto, la ley corta o la combinación de ambos”, afirmó el presidente del PPD, Jaime Quintana. Su símil del Partido Comunista, Guillermo Teillier, complementó: “La titularidad no se puede reponer de ninguna manera. Un rol preferente para el sindicato, aún no lo sabemos”.
La única “certeza” que tiene el Ejecutivo, por el momento, es que “todavía no hay una decisión tomada” sobre la aprobación o rechazo del veto presidencial y los contenidos de la ley corta, según explicó la presidenta del PS, Isabel Allende.
Según una fuente de gobierno, el comité político y la presidenta Michelle Bachelet acordaron cerrar “lo antes posible” la etapa interpretativa del fallo del TC, para avanzar al proceso prelegislativo que demandan al interior del oficialismo y, por último, a la tramitación en el Congreso. De esta forma, el análisis del fallo del TC culminaría esta semana, lo que permitiría al Ejecutivo entregar, el próximo lunes, su conclusión.
La Moneda no sólo permanece en una indefinición relativa a los procedimientos y los plazos, sino que especialmente sobre los contenidos. Mientras en el Ministerio del Trabajo creen que puede ser necesaria una “reforma a la reforma”, en Hacienda buscan acotar los temas a los pactos de adaptabilidad y correcciones menores. La conclusión sobre titularidad sindical y sus efectos sobre otras normas de la reforma laboral será clave para resolver esta disyuntiva.
También la disponibilidad que tengan los parlamentarios de Chile Vamos, para lograr un acuerdo en materia de pactos de adaptabilidad, algo que en La Moneda reconocen que ha sido muy difícil, pese al compromiso de respetar absolutamente el fallo del TC.
CUT: "Lo fundamental es restituir la titularidad sindical"
Para la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) el diagnóstico es claro: "Si no avanzamos en una reforma al inciso quinto del artículo 19 N°16 de la Constitución, nunca vamos a poder recuperar la titularidad". Así lo expresó la presidenta de la multisindical, Bárbara Figueroa, quien lamentó la determinación de La Moneda, asegurando que "la reforma constitucional debiera ser el camino y si el Ejecutivo la limita, limita la posibilidad de tener un proyecto de ley como lo habían propuesto al país".
Si la modificación de la Carta Fundamental no avanza, agregó la dirigenta, la otra opción es "mantener y aprobar" el veto supresivo que el gobierno presentó para eliminar los pactos de adaptabilidad en materia de jornadas, horas extraordinarias y jornadas pasivas, y el aumento en los quórum para que los sindicatos negocien. "Un proyecto sin titularidad y con pactos, pierde todo su sentido", señaló Figueroa, quien convocó a los trabajadores del país a participar en el paro nacional del próximo martes 31 de mayo.
Cuestionamientos a Valdés
El vicepresidente de la central, Nolberto Díaz, criticó al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, quien acotó el debate de la futura ley corta a los pactos de adaptabilidad y "mejoras de referencia". "Nos llama la atención su interés por defender la flexibilidad laboral y no buscar solución para la titularidad sindical", expresó Díaz. Al interior de la CUT existe un sector que asume que es "imposible" reponer la titularidad sindical en la reforma laboral y que aprovechará la movilización del 31 de mayo para exigir el retiro del proyecto de ley del Congreso, por ser un "retroceso" en la legislación laboral.
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