Por primera vez la ministra de Educación, Adriana Delpiano, enfrentó al comité político de La Moneda y los presidentes de partidos de la Nueva Mayoría, en una sesión especial que tuvo la instancia dedicada sólo a educación. ¿Qué se esperaba de la cita? Que la secretaria de Estado aclarara el zigzagueante camino que ha tenido la reforma educacional, en particular el proyecto sobre educación superior, tanto en términos del nuevo marco regulatorio como de la gratuidad.
La secretaria de Estado, como ha sido la tónica de algunos de sus colegas de gabinete estas semanas, hizo espacio a la autocrítica durante la reunión, según comentó el presidente del MAS y actual vocero de la Nueva Mayoría, senador Alejandro Navarro: "La ministra reconoció errores que esperamos no se repitan en materia de difusión equívoca de lo que está haciendo el ministerio", señaló apuntando a los vaivenes en torno a la gratuidad para 2016 y la información errónea que ha emanado de la cartera de Educación.
Pero más allá de esa autocrítica, Delpiano -quien abandonó la cita sin hacer declaraciones- no logró despejar la totalidad de las dudas. Éstas se refieren al cronograma entregado ayer y a los plazos.
Las diferencias giraron en torno al proyecto de educación superior que el Ejecutivo ingresará a fines de este año. La idea es que la iniciativa sea aprobada a mediados del 2016 para que sea ley y no haya que incluir -por segundo año- la gratuidad en la glosa presupuestaria, como se hará para cubrir el próximo año al 50% de la población estudiantil más vulnerable de las instituciones que cumplan con los requisitos que se establezcan.
En esa línea, el vocero de la Nueva Mayoría fue claro en señalar que no deben existir tiempos acotados, pues ya ha quedado demostrado que cuando el gobierno coloca fechas, casi nunca se cumplen:
"Le hemos sugerido a la ministra Delpiano que no se pongan plazos, después este gobierno no cumple ningún plazo, para qué poner plazos si efectivamente no los vamos a cumplir".
En dirección similar, el presidente de la Democracia Cristiana (DC), senador Jorge Pizarro, expresó que la idea es discutir, quizás en un lapso de un año dicha iniciativa legal: "El proyecto de educación superior se verá durante todo el próximo año. Y se puede demorar un poco más", acotó.
El presidente del PPD y presidente de la comisión de Educación del Senado, Jaime Quintana, junto con resaltar que en materia educativa "no se ha cambiado el rumbo", sí estimó posible cumplir con los tiempos esbozados en la reunión de ayer: "Ese plazo no está tan claro, veo que es posible cumplirlo. Todo indica que el proyecto de educación superior ingresa dentro del presente año. Y allí perfectamente alcanza a ser despachado en seis meses".
Otro punto que no quedó claro y que, según trascendió, debería establecer un criterio en los próximos días es si dicho proyecto ingresará por separado (gratuidad, nuevo marco regulatorio) o de forma conjunta. En el oficialismo estiman que esta discusión necesita un ajuste técnico legislativo que se está trabajando entre el ministerio y el Parlamento.
La discusión de los plazos se da en medio de las declaraciones de Eyzaguirre sobre la "vorágine legislativa" y algunos en la NM ven que justamente establecer menos tiempos de discusión a proyectos complejos como el de educación superior, apunta en la dirección contraria a la autocrítica realizada por el ministro Segpres.