En mayo, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) inició un proceso de modernización a cargo de Estefany Artus. Esta nueva política apuntaba a analizar y evaluar las funciones de los distintos departamentos y subdepartamentos técnicos del organismo.
Según conocedores de la iniciativa, ya terminó la primera ronda de reuniones y capacitaciones. El trabajo se concentró en conocer en detalle las funciones de cada dependencia para luego iniciar una serie de entrevistas y jornadas de charlas con los jefes y subjefes de los distintos departamentos, contrarrestando esa información con la función que efectivamente realizan los funcionarios.
La directora del ente estadístico, Ximena Clark, señaló en una reciente entrevista con Diario Financiero, que este proceso de modernización busca mejorar la gestión y los procedimientos al interior del INE. Asimismo, dijo que un equipo está haciendo capacitación interna a los funcionarios, de manera de enseñar a las unidades cómo se cuantifica y diagnostica los procesos (estadísticos) actuales para agilizar y ser más eficiente.
Según fuentes al interior del INE, durante agosto se iniciará la segunda etapa que tendrá carácter resolutivo. Así, se comenzarán a concretar algunos cambios en la gestión y en los procesos que realiza el INE. Estas medidas apuntan también a mejorar el clima interno y a recobrar las confianzas al interior de organismo. Todo esto se enmarca dentro del contexto del proyecto de ley que le dará autonomía al INE.
Cuando se dio a conocer el plan del Censo abreviado 2017, se informó que en julio se iban a conocer los integrantes del comité externo que tendría como misión supervisar todo el proceso de realización del nuevo levantamiento censal. Sin embargo, aún no se conocen los nombres de quienes tendrán dicha misión. También están pendientes los resultados de la auditoría interna a la base de datos del fallido proceso 2012, que se presentarían en julio.