Las subidas regresaron al fin a las bolsas asiáticas. Wall
Street pudo al cierre de ayer capear todo el temporal que azotó al sector
financiero, y una actitud similar adoptaron los inversionistas de la renta
variable asiática, con la excepción de los mercados chinos, presionados por la
creciente expectativa de un mayor endurecimiento en la política monetaria
local.
Los inversionistas de las bolsas asiáticas templaron también sus
nervios, y apostaron por la toma de posiciones en valores fuertemente castigados
en las sesiones anteriores. Los rebotes alcanzaron el 1,5% en el índice Nikkei
de Tokio. En el índice regional MSCI Asia Pacific Index los avances eran más
limitados, del 0,4%.
La peor parte se la llevaban los mercados chinos, con descensos que
han alcanzado hasta el 6%. El propio primer ministro del gigante asiático, Wen
Jiabao, dejó claro que es necesario endurecer las medidas para evitar que la
inflación continúe disparada. Las posibles medidas de endurecimiento de la
política monetaria se producirían en un contexto de claro freno en la economía
mundial, y con una evidente tendencia bajista en los tipos de interés en
Estados Unidos, como volverá a poner hoy de manifiesto, previsiblemente, la Reserva Federal.
La remontada hasta los 11.964 puntos en el Nikkei contó con el
especial beneplácito de los valores financieros, los más castigados en los
últimos días. Las aseguradoras recibieron además el apoyo de los analistas de
Deutsche Bank, para estímulo de cotizaciones como las de Sompo Japan Insurance,
Aioi y Nipponkoa Insurance. Entre los bancos, Shizuoka Bank recupró un 5%, y
los dos grandes del sector, Mitsubishi UFJ y Mizuho Financial, rebotaron un
2,2% y un 1,1%.
Las empresas minoristas, y las aerolíneas, se sumaron también a la
mejora, todo lo contrario de lo que sucedió con las compañías ligadas a las
materias primas, presionadas por la corrección en mercados como el del
petróleo. Las dos mayores caídas del Nikkei 225 correspondieron a Sumitomo
Metal Mining y a Toho Zinc, con más de un 7% de pérdidas. La petrolera Inpex
cedió un 2% y un 2% su rival Showa Shell.
Las empresas más orientadas a la exportaciones tuvieron también
dificultades para sumarse a la reacción de la Bolsa de Tokio. Las sombrías
perspectivas sobre la economía estadounidense, y la nueva revalorización del
yen frente al dólar, dejaron en negativo las cotizaciones de compañías como
Honda Motor, Toshiba, Hitachi, Sanyo Electric y Nissan.