Wall Street volvió a evitar este lunes el denominado "territorio de corrección", pero igual completó esta jornada su peor trimestre desde 2022. Y la Bolsa de Santiago perdió sus máximos históricos, pero de todos modos prolongó una larga seguidilla de ganancias mensuales. Todo esto, a dos días de que Donald Trump haga su esperado anuncio de aranceles en el "Día de la Liberación", término acuñado por el propio mandatario.
El S&P IPSA chileno bajó 0,6% hasta los 7.658,59 puntos, después de que el viernes subiera a contracorriente de las bolsas mundiales. Andina-B (-2,34%), Aguas Andinas-A (-2,19%) y Ripley (-1,96%) encabezaron las bajas de esta sesión.
"La caída registrada hoy parece estar más relacionada con un fenómeno de toma de utilidades, especialmente considerando los máximos históricos alcanzados recientemente por el IPSA, que con factores internos estructurales", dijo a DF el socio líder de consultoría en BDO Chile, Emilio Venegas.
El IPSA subió 4,32% en el conjunto de marzo y encadenó así nueve meses de ganancias, su racha más larga de alzas mensuales desde marzo de 2005. Además, avanzó 13,99% en el acumulado del primer trimestre.
De acuerdo con Venegas, "si bien es cierto que el escenario externo continúa marcado por tensiones arancelarias y cierta incertidumbre comercial a nivel global, también se observan algunos elementos que podrían jugar a favor de la economía chilena en el corto y mediano plazo. Uno de ellos es el reciente repunte en el precio del cobre, impulsado por expectativas de reactivación industrial en Asia y señales de recuperación en la demanda por materias primas".
Acorde a lo planeado
Después de un viernes especialmente malo para Wall Street, este profundizó sus caídas durante la mañana, y el S&P 500 operó incluso en zona de corrección (una baja de 10% desde su último peak, como ocurrió el 13 de marzo). Pero ya al cierre de la sesión, el S&P 500 recuperó 0,56% y el más defensivo Dow Jones 1,01%. Por su parte, el tecnológico Nasdaq perdió sólo un leve 0,14%. El S&P 500 anotó en marzo su peor mes y su peor primer trimestre desde 2022.
"Seguimos negociando con el telón de fondo de la incertidumbre arancelaria y un manto de secretismo sobre lo que puede venir después", dijo el estratega global jefe de Freedom Capital Markets, Jay Woods, citado por CNBC. "Como resultado, los inversionistas venden primero y luego esperan. Tiene todos los ingredientes de una venta de pánico seguida de un rebote fuerte y rápido", sostuvo.
El malestar inicial sí quedó plasmado en el cierre de Europa, donde el Euro Stoxx 50 de la zona euro perdió 1,56% y el FTSE 100 de Londres retrocedió 0,88%. Y dejó una huella particularmente negativa en Asia, donde el Nikkei japonés se hundió 4,05% para ubicarse en territorio de corrección.
"Los obstinados comentarios de Trump el fin de semana sugieren que el 'Día de la Liberación' continuará según lo previsto este miércoles, en contraste con las esperanzas de que las medidas se convirtieran simplemente en una táctica de negociación", escribió temprano el jefe de mercados en Interactive Investor, Richard Hunter.
El oro spot superó los US$ 3.100 la onza por primera vez. El VIX de volatilidad de opciones -conocido como el "índice del miedo"- llegó a escalar más de 10%, pero luego revirtió por completo sus avances de hoy.
Goldman Sachs volvió a recortar su precio objetivo para el S&P 500, y elevó a 35% su probabilidad estimada de que EEUU entre en recesión. Goldman prevé que Washington anuncie tarifas recíprocas del 15% en promedio a todos sus socios comerciales.
"Con los aranceles en la mente de los inversionistas de todo el mundo antes de su aplicación el 2 de abril, es de esperar cierto nerviosismo en los mercados esta semana. Además, vienen datos económicos clave de EEUU para marzo, incluyendo cifras de empleo y desempleo, junto con datos sobre salarios, horas trabajadas y la tasa de participación laboral", publicó el estratega jefe de Oppenheimer Asset Management, John Stoltzfus.
"Teniendo en cuenta el comportamiento de los mercados desde el último máximo histórico del S&P 500 el 19 de febrero, cabría esperar que esta semana se redujera la volatilidad si las cifras de empleo no decepcionan y contrarrestan parte del reciente malestar por las acciones y la tendencia de los bajistas, los escépticos y los inversionistas nerviosos a pronosticar estanflación, recesión y otra caída de los precios de mercado", razonó.