CMF entra a la disputa entre la FNE y el TDLC por situación de Transbank: regulador acusa que no tiene atribuciones y critica a la Fiscalía
La presidenta de la CMF indicó que, acorde con sus facultades legales, al organismo “no le permiten fijar tarifas o exceder el ámbito de acción”.
- T+
- T-
La definición del esquema de tarifas de Transbank para sus comercios aún está lejos de resolverse. Luego que la Fiscalía Nacional Económica (FNE) interpuso un recurso de queja contra los ministros del Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) ante la Corte Suprema después que definió enviar los antecedentes del caso a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) para que establezca los cobros que debe realizar la compañía controlada por la banca, el regulador entró al cuadrilátero del conflicto que mantienen las autoridades.
La presidenta de la CMF, Solange Berstein, remitió el jueves un informe al máximo tribunal del país dio cuenta que, a su juicio, el organismo “considera que carece de atribuciones en materia de fijación de las tarifas que sus fiscalizados cobran por los servicios que legítimamente pueden prestar”. Añadió que el Banco Central tampoco cuenta con potestades en materia tarifaria.
La presidenta de la Comisión expuso a la Corte Suprema que “siguiendo la experiencia internacional, y con fundamentos económicos y regulatorios que esta institución estima adecuados, nuestro país optó por abordar la problemática de la tarificación del merchant discount (MD o tarifa por aceptación de tarjetas), a través de la fijación de solo uno de sus componentes, en este caso las tasas de intercambio (o TI), lo que implica una decisión meditada de no regular tarifas en sus restantes elementos”.
Berstein indicó que al revisar la legislación de otros países “se concluye que la regulación o fijación de MD es excepcional y ocurre sólo cuando existe un único operador o dónde es posible establecer que estas empresas tienen el poder suficiente como para apropiarse del excedente del consumidor”.
Explicó que en los mercados donde hay múltiples operadores, “la regulación se centra en regular las tasas de intercambio, dejando margen a que el mercado determine los restantes elementos del MD. Lo anterior es coherente con la existencia de diversos operadores, los que, a su vez, pueden participar en diferentes nichos de mercado, ofrecer diversos servicios complementarios, y tener estructuras de costos diversas”.
Enfatizó que el organismo acorde a sus facultades legales “no le permiten fijar tarifas o exceder el ámbito de acción”.
Los efectos negativos
Esgrimió que “las potenciales determinaciones sobre las tarifas que afectan a actores involucrados en el sistema de pagos pueden incidir directamente en su solvencia y viabilidad o afectar el desarrollo futuro de dicho sistema, por lo que las consecuencias de las determinaciones que se adopten este ámbito impactan en forma directa los objetivos institucionales de la CMF”.
Berstein señaló que Transbank ha ido perdiendo participación en los últimos años, pero aún sigue siendo un actor relevante en el sistema de pagos. Por ello, consideró que “la eventual fijación de una tarifa que ponga en riesgo su solvencia podría afectar de manera grave la cadena de pagos global en la economía”.
Hizo ver que “si bien algunos de los servicios que presta Transbank son reemplazables por otros operadores con relativa facilidad hay servicios en que, dada su participación relativa en la industria, la ausencia de Transbank no se puede absorber por el resto de los actores”.
Críticas a la FNE
Berstein mostró su preocupación que se fije el MD en un valor igual o inferior a la tasa de intercambio. De hecho, especificó que sus alertas se concentran ante “la posibilidad que se fijen los MD en los niveles recomendados por la FNE en su oficio a al TDLC”.
La CMF criticó que la fórmula planteada por la FNE “tendría efectos en la solvencia y viabilidad de Transbank”. Agregó que un MD de 0,4% para todas las transacciones que liquida “también pondría en riesgo la viabilidad financiera de múltiples instituciones existentes e impactado severamente el desarrollo futuro de este mercado al establecer un MD que con las actuales tarifas de intercambio hace inviable financieramente el modelo de los operadores existentes y futuros”.
Entre los antecedentes puestos a disposición, los actores que han presentado sus proyectos para incursionar en el negocio de medios de pagos ante la CMF "fueron evaluados considerando tasas de intercambio que, en promedio, bordeaban 0,7% y, por supuesto, con MD por sobre esos valores. En algunos casos, las proyecciones de utilidades para estas nuevas entidades mostraban valores positivos tras varios años de operación, lo cual bajo escenarios más restringidos de tarifas pueden perfectamente llevar a una situación de inviabilidad a éstos. Asimismo, en el caso de los operadores, sus proyectos incluyen como supuesto un MA sobre 1%".
La Comisión propuso que se debería considerar una estructura tal, “que se permita algún grado de diferenciación por alguna tipología de costos o volumen que permita la coexistencia con otras redes de adquirencia”.
Planteó que “históricamente algunos grandes comercios han tenido niveles de tarifas de MD excepcionalmente bajos. Este no es un esquema tarifario que parezca deseable de replicar, y tampoco se aprecia como un equilibrio sostenible en el modelo de cuatro partes”.
Recalcó la necesidad de establecer condiciones tarifarias “claras y estables, que otorguen certeza al mercado de los medios de pago en el más breve plazo, en el contexto del modelo operacional de cuatro partes preponderante en la actualidad”.