A principios de enero, Accenture publicó su estudio Technology Vision 2025 -en el que participaron 4.021 ejecutivos de 28 países- el que identificó las cuatro tendencias tecnológicas asociadas a la inteligencia artificial (IA) que transformarán los negocios a nivel global este año: el big bang binario; personalización de agentes de IA y diferenciación entre marcas; la evolución de los robots, y el nuevo ciclo de aprendizajes.
El estudio plantea que está surgiendo un “cerebro digital cognitivo” en las organizaciones, que funcionará como un copiloto capaz de tomar decisiones operativas. Esto marcará una nueva era de la IA, más autónoma y generalizada, la que deberá fundarse en una base de confianza para aprovechar sus beneficios en las organizaciones.
El presidente de Accenture para Hispanoamérica, Nicolás Goldstein, dijo que la IA se está masificando tanto a nivel mundial como en Chile, siendo “omnipresente” y cada vez más autónoma, y afirmó que el país “no está viviendo una realidad diferente” a los más avanzados en desarrollo y adopción tecnológica.
“Las herramientas de última generación que se están desarrollando en Estados Unidos son las mismas que estamos desarrollando en Chile. Cuando vemos a los ejecutivos encuestados a nivel mundial y observamos la muestra de Chile, los resultados son bastante parecidos. La tecnología está en todos lados y llega a todos lados al mismo tiempo. Eso no ocurría antes”, comentó.
Respecto de las cuatro tendencias, explicó que el big bang binario o tecnológico implica la transición de aplicaciones tradicionales hacia ecosistemas de agentes de IA generativa capaces de tomar decisiones autónomas y gestionar grandes volúmenes de datos. “Ya no se necesitará personal para codificar, ya que los agentes lo harán solos, y esto permitirá a las empresas avanzar más rápido y de forma más económica”, dijo.
En el caso de Chile, 31% de los encuestados anticipa un aumento en el uso de agentes de IA en sus empresas en los próximos tres años.
Respecto de la segunda tendencia, la personalización de los agentes de IA, el estudio plantea que las marcas y empresas deberán dotar de personalidad a sus agentes para diferenciarse del resto y establecer relaciones personalizadas con los clientes.
“Las aplicaciones van a desaparecer y van a quedar solo los agentes virtuales. Entonces las marcas tienen un desafío enorme de cómo van a ser únicas”, señaló Goldstein.
Robots autónomos y capacitación
La tercera tendencia, la evolución de la robótica, establece que existirá una transición de robots para tareas repetitivas en espacios controlados a otros con mayor autonomía, capaces de razonar, entender el lenguaje natural, y operar en entornos no predecibles.
Según Goldstein, la robótica autónoma está “mucho más cerca” de masificarse en Chile de lo que se creía, desde la automatización industrial hasta robots domésticos, impulsados por vision language models (VLM), que aprenden a partir de imágenes.
“En los próximos 10 años van a haber robots autónomos entre nosotros, capaces por ejemplo, de levantar la mesa y lavar los platos en un hogar”, afirmó.
La cuarta tendencia tiene que ver con el inicio de un nuevo ciclo de aprendizaje entre los humanos y la tecnología, pues la IA generativa se vuelve más útil cuando se usa.
Goldstein dijo que el éxito en Chile dependerá de construir confianza en los sistemas y de capacitar a los trabajadores en estas herramientas.