Estrategas de Wall Street dicen que el dólar podría ir camino a una "dramática caída"
Moneda estadounidense ha caído a mínimos de casi tres meses frente a sus pares durante la última semana.
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Los estrategas de bancos como Goldman Sachs y JPMorgan ahora están apostando a una caída del dólar estadounidense, luego de que una ola de optimismo sobre la recuperación global del coronavirus empujara a la divisa a la baja frente a sus pares.
El dólar ponderado por transacciones cayó el martes a su nivel más bajo desde mediados de marzo, continuando con una racha de retrocesos de cinco días. El dólar estadounidense cotizó a su nivel más bajo frente a su par australiano desde enero, mientras que se debilitó frente al euro y la libra esterlina y las principales monedas de los mercados emergentes, como el yuan chino.
En los últimos días, Goldman Sachs, JPMorgan, Deutsche Bank y Citigroup han argumentado que el largo ascenso de la moneda finalmente podría haber llegado a su fin. Más de dos años de alzas casi ininterrumpidas terminaron en marzo, pero el dólar se mantuvo obstinadamente firme, incluso después de que la Reserva Federal redujo las tasas de interés a casi cero e inundó los mercados con liquidez a través de líneas de canje internacionales.
Sin embargo, los analistas ahora señalan que varios soportes para el dólar han caído recientemente o comenzaron a tambalearse.
"Durante los últimos meses habíamos estado recomendando a los inversionistas no apostar contra el dólar en sus carteras debido a nuestra preocupación por el contexto general, pero eso ha cambiado", dijo Zach Pandl, estratega de Goldman.
Pandl señaló que las grandes economías, incluida China, han comenzado el proceso de reapertura con bajas tasas de contagio, mientras que la propuesta francoalemana de un fondo de recuperación para la UE ha impulsado al euro, aliviando las preocupaciones fiscales en toda Europa. "Ahora creemos que es apropiado para los inversionistas posicionarse a la baja en dólares en sus carteras", agregó.
Los analistas de JPMorgan escribieron esta semana que, a medida que se levantan las cuarentenas, un sentimiento más positivo sobre el crecimiento global se ha convertido en un "motor clave" para la venta masiva de dólares. "Ya no nos sentimos cómodos para cuestionar este optimismo y reafirmar nuestras recomendaciones comerciales defensivas anteriores", dijeron los analistas.
En marzo, cuando las preocupaciones por el brote de Covid-19 llegaron a su punto máximo, la divisa estadounidense se disparó mientras los inversionistas acumulaban dólares en un esfuerzo por pagar deudas y encontrar seguridad en la moneda de reserva mundial. A medida que la economía global se desaceleraba y los mercados bursátiles se hundían, el dólar subió a niveles récord frente a monedas como el real brasileño y la libra esterlina. Luego de eso, las preocupaciones sobre el aumento de los riesgos en la zona euro y las tensiones entre EEUU y China alentaron las búsquedas de refugio seguro, manteniendo al dólar firme.
Pronlongado declive
“La principal historia en los mercados cambiarios este año ha sido la fortaleza del dólar. A pesar de que los rendimientos en EEUU se han derrumbado, el dólar se había mantenido sólido", dijo George Saravelos, codirector global de investigación cambiaria en Deutsche Bank.
El dólar perdió atractivo luego de que las tasas de interés en EEUU colapsaran a casi cero, pero los inversionistas han tenido dificultades para encontrar alternativas. Daniel Katzive, jefe de estrategia cambiaria para América del Norte de BNP Paribas, dijo que los inversionistas aún tenían muchos dólares en sus carteras, un hecho que sugiere que el billete verde se encamina a un "movimiento bastante dramático a la baja".
Calvin Tse, estratega de Citigroup, dijo que el dólar ahora podría estar enfrentando un largo período de debilidad. "Si la economía global realmente está tocando fondo y comienza ahora a recuperarse, y las tasas de interés de EEUU siguen en cero y el crecimiento potencial es más bajo que el de los mercados emergentes, podríamos ver al dólar entrar en un mercado bajista que podría durar de cinco a 10 años", pronosticó.