Los miembros del Fondo Monetario
Internacional (FMI) aprobaron hoy por mayoría, con el 94,6%, el
nuevo sistema de distribución de los votos, que aumenta el poder de
algunos países como China e India, informó hoy esa institución.
"Veo este resultado como el comienzo de una nueva legitimidad del
Fondo", dijo en un comunicado el director gerente del FMI, Dominique
Strauss Kahn.
"La nueva estructura representa un paso importante hacia la
redistribución de las acciones con voto, hacia un mercado emergente
dinámico", añadió.
La medida, que aumenta el poder de voto de 54 de los 185 países
miembros del FMI, requiere la aprobación de algunas legislaturas,
incluido el Congreso de Estados Unidos.
La redistribución es una de las reformas más integrales del
sistema de votación dentro del FMI desde la creación de esa
institución en 1944.
La nueva fórmula para el reparto del poder en el Fondo aumenta en
un 2,7% el voto de las naciones en desarrollo y beneficia
también a países como España e Irlanda.
En la reciente reunión del FMI y el Banco Mundial en Washington,
el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Henry Paulson, pidió
durante el debate una reforma del Consejo Ejecutivo, el directorio
de 24 miembros que representan a los accionistas y que toma las
decisiones del día.
Paulson propuso la reducción de las sillas a 22 para 2010 y a 20
para 2012, lo que requiere que renuncien a ellas los países de la
Unión Europea, los cuales designan o tienen gran influencia en el
nombramiento de los ocupantes de 10 de ellas.
El comunicado, la institución indicó que, al término del plazo de
votación, los gobernadores de 180 de los 185 países miembros habían
emitido sus votos y 175 lo hicieron a favor de los cambios en la
distribución del poder.
Tres países votaron en contra, dos se abstuvieron y cinco no lo
hicieron, según el Fondo.
"Los cambios realzarán la participación y la voz del mercado
emergente y los países en desarrollo, y redistribuirá las acciones
de los miembros de acuerdo con su peso relativo y su papel en la
economía global", precisó el FMI.
La aprobación requería, al menos, el 85 por ciento del voto
total.