Economía

FMI advierte de que las economías emergentes no pueden afrontar una reducción de los estímulos

La deuda pública media de las grandes economías emergentes pasó del 52,2% del PIB al 60,5% en 2020.

Por: Financial Times | Publicado: Lunes 30 de agosto de 2021 a las 10:54 hrs.
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Gita Gopinath, economista jefe del FMI.
Gita Gopinath, economista jefe del FMI.

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Los mercados emergentes no pueden permitirse que se repitan los vaivenes de los mercados financieros ocurridos en 2013 debido a que la Reserva Federal de EEUU señaló que iba a retirar los estímulos económicos antes de lo previsto, lo que provocó un aumento de los costos de los créditos a nivel mundial, advirtió Gita Gopinath, economista jefe del FMI.

En una entrevista concedida a Financial Times, Gopinath se mostró muy prudente ante el hecho de que la Reserva Federal tiene previsto reducir su apoyo a la pandemia, destacando las presiones económicas existentes sobre los países de renta media y baja, que han sufrido de forma desproporcionada la crisis del coronavirus.

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También advirtió de las posibles consecuencias en caso de que la inflación se convierta en un mayor problema EEUU y obligue a endurecer repentinamente la política monetaria.

"Los mercados emergentes se enfrentan a vientos en contra mucho más fuertes. Se están viendo afectados de muchas maneras, por lo que no pueden permitirse que se produzca una sacudida en los mercados financieros originada por los principales bancos centrales", señaló Gopinath.

Gopinath hizo estos comentarios después de que Jay Powell, el presidente de la Reserva Federal, indicara en un discurso pronunciado el viernes en el simposio virtual de banqueros centrales de Jackson Hole que la economía estadounidense sería lo suficientemente fuerte como para aguantar que la Reserva Federal comenzara a reducir su programa de compra de activos de US$ 120.000 millones este año.

La actividad empresarial ha experimentado un fuerte repunte en los últimos cinco meses gracias a la campaña de vacunación contra el Covid-19. Los precios al consumo en EEUU también se han disparado, impulsados por el auge de la demanda y los cuellos de botella en las cadenas de suministro que han provocado una gran escasez de algunos productos.

Las presiones inflacionistas han subido más y más rápido que lo que la mayoría de los economistas esperaban, aunque la Reserva Federal lleva tiempo diciendo que se desvanecerán con el tiempo. Pero los responsables de la política monetaria opinan que ahora es mayor el riesgo de que puedan persistir durante más tiempo, especialmente debido a la variante Delta, más contagiosa, que está produciendo un alarmante aumento de los casos de Covid en todo el mundo.

"Muchos de los problemas a los que nos enfrentamos, incluidos los de la inflación y los cuellos de botella en las cadenas de suministro, tienen que ver con el hecho de que la pandemia está haciendo estragos en diferentes partes del mundo. Si la inflación alta se prolonga, podría incrementar las expectativas de inflación en el futuro. Nos preocupa que la inflación suba mucho más que lo esperado, ya que eso requeriría una normalización mucho más rápida de la política monetaria en EEUU", declaró Gopinath.

El FMI calculó en julio que el PIB mundial podría reducirse en US$ 4,5 billones de forma acumulada en 2025 debido a nuevas olas de infecciones en los mercados emergentes, a los que les está costando mucho conseguir vacunas, y a una normalización "masiva" de la política monetaria en EEUU, aunque ese no sea el caso base del FMI.

Según Maurice Obstfeld, ex economista jefe del FMI y profesor de la Universidad de California en Berkeley, el daño sería especialmente grave para los países de renta media y baja, dado el aumento de sus niveles de deuda desde el inicio de la pandemia.

La deuda pública media de las grandes economías emergentes pasó del 52,2% del PIB al 60,5% en 2020, según el Instituto de Finanzas Internacionales (IFI). Fue el mayor aumento de la historia y ayudó a los países a capear la pandemia.

Muchos están hoy en mejor situación que en 2013. Las mayores reservas de divisas y los mejores balances presupuestarios y externos han fortalecido sus defensas, pero una gran crisis podría destruir ese amortiguador.

"Si se ven afectados por un aumento repentino del endurecimiento de las condiciones de financiación en dólares y tal vez por una inversión de los flujos de capital, eso podría ser bastante devastador con una pandemia en curso", señala Obstfeld.

Según el IFI, en los primeros nueve meses de 2020 se invirtieron más de US$ 360.000 millones en renta variable y renta fija de mercados emergentes. Aunque el ritmo de inversión ha disminuido desde entonces, muchos países siguen siendo muy vulnerables a un cambio rápido en la opinión de los inversionistas.

El aumento de la inflación ya ha obligado a varios países a subir los tipos de interés, entre ellos Brasil, Hungría, México y Rusia, pero podría ser necesario un endurecimiento adicional para evitar la fuga de capitales y la depreciación de las divisas, lo que provocaría más penurias económicas.

Gopinath sostuvo que los banqueros centrales deben proporcionar "información muy clara" de forma frecuente sobre su política económica futura, como lo ha hecho Powell. "Uno de los problemas de la declaración que hizo el entonces presidente Ben Bernanke en 2013 no fue tanto que la Reserva Federal empezaría a reducir la relajación cuantitativa, sino que también señaló que los tipos de interés empezarían a subir más rápido de lo que se esperaba. Esta vez la Reserva Federal ha declarado claramente que primero comenzará a reducir los estímulos y luego empezará a subir los tipos de interés", concluyó Gopinath.

 

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