La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, y el
mandatario de Venezuela, Hugo Chávez, debieron suspender este martes una visita
a su colega boliviano, Evo Morales, a consecuencia de la ola de conflictos
sociales que afecta a Bolivia.
El clima de confrontación se intensificó este martes en
varias regiones de Bolivia, donde el próximo domingo la ciudadanía está llamada
a las urnas para pronunciarse sobre si deben continuar en sus cargos el
presidente Morales, el vicepresidente Álvaro García Linera y ocho de los nueve
prefectos (gobernadores) del país.
A cinco días de esta consulta, el mandatario boliviano tenía
previsto reunirse en la capital de Tarija (sur del país) con Fernández y
Chávez, para afianzar las relaciones de los tres países y suscribir acuerdos en
materia energética, principalmente.
Pero unas horas antes de la cita, un grupo de personas
lideradas por el opositor Comité Cívico tarijeño se enfrentó con la policía en
el aeropuerto de esa ciudad al que se sumó otro violento enfrentamiento en el
departamento de Oruro entre la policía y mineros de Huanuni, el yacimiento de
estaño más grande de Bolivia, que bloqueaban la ruta troncal que une La Paz con
Cochababamba y Santa Cruz.
En este conflicto, que aún continúa, dos mineros han muerto
y 30 han resultado heridos, según informaron medios locales.
El Ejecutivo de Evo Morales aseguró que los policías que
intervinieron en el enfrentamiento no llevaban armas de fuego, según dijo el ministro
de Gobierno (interior), Alfredo Rada, descartando que los uniformados fueran
los responsables de los fallecimientos.
Por su parte, Hugo Chávez afirmó este martes en Buenos Aires
que si Evo Morales, pierde el referendo convocado para el próximo domingo se
irá del Gobierno "con dignidad".
"Hay un proceso democrático en Bolivia, si Evo
(Morales) pierde el referéndum estoy seguro de que se va del Gobierno, así, con
dignidad", dijo Chávez en una rueda de prensa en la capital argentina,
donde concluirá este martes una visita de trabajo.
"Pero estoy seguro de que va a seguir luchando y todas
las encuestas indican que va ganando con un 60%", agregó el mandatario
venezolano, que denunció los actos de violencia que se están desarrollando en
Bolivia en contra de Morales.
"Ojalá la oposición boliviana acepte los resultados,
pero estos hechos de violencia indican que no están dispuestos a aceptar
resultados democráticos", afirmó.