El Gobierno de Bolivia declaró hoy el
estado de sitio en el departamento de Pando, en el norte del país,
ante la "violencia desbordada" en la región y "un creciente número
de víctimas".
El ministro de Defensa, Wálker San Miguel, leyó ante los
periodistas en el Palacio de Gobierno de La Paz un decreto supremo
aprobado esta tarde que establece una situación excepcional de
"extrema gravedad" para "garantizar la vida" y "los intereses de la
colectividad" en el departamento de Pando.
El estado de sitio conlleva, entre otras restricciones, la
prohibición de portar armas de fuego, armas blancas, materiales
explosivos y la circulación de más de tres personas juntas y de
vehículos entre la medianoche y las seis de la mañana (local).
Esta medida también supone la prohibición de organizar mítines,
reuniones políticas y manifestaciones y la necesidad de pedir un
salvoconducto a la policía departamental de Pando para poder viajar
fuera de la región.
"Pando vive momentos de terror y de violencia desbordada", afirmó
el ministro de Gobierno (Interior), Alfredo Rada, quien aseguró que
se ha producido una "masacre" en la zona en un enfrentamiento armado
entre civiles ocurrido ayer en la localidad de Porvenir.
El ministro habló de un "número creciente" de víctimas mortales
-que no concretó-, ya que a los nueve cadáveres reportados
oficialmente en la morgue de Cobija, la capital de Pando, "se van
sumando más cuerpos sin vida encontrados en el monte y el río"
cercanos a la zona.
Según versiones extraoficiales que han circulado en las últimas
horas, serían quince las personas muertas como consecuencia de los
actos violentos en Pando.
Después de este choque, la ciudad ha vivido saqueos y actos
vandálicos, añadió Rada, quien sentenció que la violencia en este
departamento ha ocasionado "crímenes de lesa humanidad" y "una gran
conmoción interna" en esta región.
La comparecencia de los ministros, que estuvieron acompañados del
Alto Mando militar, se produjo minutos después de que el presidente
Evo Morales recibiera al prefecto (gobernador) de Tarija, Mario
Cossío, que acudió a La Paz en representación de sus colegas
autonomistas para intentar abrir un proceso de diálogo.