La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, anunció hoy
que ha recibido una "interesante" oferta de tres grandes bancos
representantes de tenedores de bonos de deuda del país para reabrir la
reestructuración de títulos concretada hace tres años.
"Anuncio que hemos recibido la propuesta de tres
importantísimos bancos internacionales sobre la situación de los titulares de
bonos que no ingresaron en el canje de 2005", dijo Fernández durante un
discurso ante el Consejo de Relaciones Internacionales, una institución privada
de Nueva York.
Argentina concretó hace tres años una millonaria
reestructuración de su deuda con acreedores privados en cese de pagos desde
2001, que no fue aceptada por el 24 por ciento de los tenedores de bonos, con
títulos por unos 20.000 millones de dólares, que quedaron fuera del canje, que,
en total, ascendió a más de 81.800 millones de dólares.
La presidenta argentina, que se reconoció "optimista y
entusiasmada", explicó que esos tres bancos, a los que no identificó, han
hecho una propuesta mucho más favorable para Argentina que las condiciones del
canje establecidas en 2005.
Apuntó que esta propuesta incluye una refinanciación de
préstamos que ayudará a financiar la deuda pública que vence en 2009 y 2010.
Esos préstamos garantizados se realizaron a través de
títulos colocados en 2001 en las carteras de bancos y administradoras de fondos
de jubilación y pensiones, por un total de 13.400 millones de dólares, de los
que 3.100 millones vencen el año próximo.
Fernández aseguró que estudiará la oferta y, si la considera
aceptable, la remitirá al Parlamento, para tratar, en última instancia, de
"normalizar la relación de Argentina con el mundo", lo que redundaría
"definitivamente en el"bienestar" del país.
El canje de la deuda pondría fin a una dura etapa para
Argentina, tras un proceso de recuperación iniciado en 2003, según Fernández,
quien recordó que cuando el ex presidente Néstor Kirchner, su esposo, accedió
al poder, lo hizo con un porcentaje de votos (22 por ciento) inferior al paro
existente entonces y con un endeudamiento cercano al 160 por ciento del
Producto Interior Bruto (PIB) del país.
Desde 2003 "comenzó una tarea de desendeudamiento
porque sabíamos que era una cuestión importante para aproximarse desde la
credibilidad y la confianza al resto del mundo. Esto lo vimos también hace poco
cuando anunciamos el pago al Club de París", agregó.
Durante su visita a Nueva York, la presidenta argentina
buscará acordar con líderes europeos que integran el Club de París los detalles
para cancelar la millonaria deuda que el país tiene con ese foro, integrado por
19 naciones desarrolladas.
En su discurso añadió que cinco años y medio después,
Argentina sigue creciendo, de tal forma que en 2007 el PIB creció al mayor
ritmo de los últimos cien años.
"Si este año se cumple el pronóstico, estaríamos en el
círculo más virtuoso de nuestra historia", afirmó.
En su opinión, el canje de esa deuda supondría el
"cierre definitivo" de una dura etapa para Argentina, que comenzó en
2001, un año que también es una "fecha emblemática" para Estados
Unidos para el resto del mundo.
La presidenta argentina hizo un repaso sobre lo que ha
cambiado su países desde entonces, así como el resto del mundo y destacó como
un elemento clave la decisión unilateral de Estados Unidos de invadir
Afganistán.
"Desde entonces el mundo es menos seguro", aseguró
Fernández, quien abogó por el respeto del derecho internacional a la hora de
combatir el terrorismo y "no usar los mismos recursos que utilizan los
terroristas".
Por ello, abogó por el mantenimiento del multilateralismo,
con la ONU como principal agente, y puso el ejemplo de los esfuerzos
concertados en Latinoamérica entre los diferentes países para evitar
confrontaciones.