Estamos entrando a una nueva era en la medición de audiencias y el consumo de medios. Ese es el diagnóstico del CEO global de GfK, Matthias Hartmann, que en su corto paso por Chile explicó los desafíos que deberá enfrentar el proveedor que se quede con el registro del rating de TV en el país, tras el vencimiento del contrato que hasta 2016 mantienen los canales con Time Ibope.
El ejecutivo destaca que una tendencia de consumo es que las audiencias están interactuando en varias plataformas a la vez. "En otros países el consumo de la televisión no está bajando, se agregan elementos en línea y móviles, se utilizan tres pantallas para interactuar y por eso, un buen aviso publicitario es el que tiene un buen complemento en TV, actividades on line o móviles.Todo va a llegar a un punto donde se produce eficiencia, y ese es el nuevo método de medición al que nosotros estamos apuntando", detalla.
Agrega que este cambio en la medición de las audiencias está siendo rápido. "Estamos viendo el fin de una era donde está separada la televisión de lo que está en línea y de lo móvil. Avanzamos a un mundo donde la industria de los medios beneficia a los consumidores, a los publicistas y también a sí mismos", explica.
Respecto a la renovación del sistema actual en Chile frente a lo que está pasando en otros países más desarrollados, Hartmann dice que cada país tiene sus propias velocidades. "Yo no voy a sugerir lo que va a hacer el país, pero sí puedo decir que las mismas tendencias de medición multiplataforma se van a producir aquí y es lo que está pasando a nivel global. Es el mercado el que pide innovación", dice.
La propuesta
Para el caso chileno, la propuesta que GfK hizo a los canales nacionales fue utilizar la misma plataforma para registrar el rating de televisión, radio e internet usando una misma tecnología integrada, pese a que en la mayoría de los casos la medición de las radios se hace de manera independiente.
La experiencia de esta firma en la región partió con la medición en Brasil, despliegue que tomó cerca de 2 años entre los estudios de mercado previos y la posterior instalación de la tecnología necesaria. En Chile, en el supuesto de que GfK gana la eventual licitación, el traspaso del sistema actual al nuevo tardaría entre 6 y 9 meses.
Además el ejecutivo dice que uno de los efectos para los publicistas sería el mayor detalle de las audiencias a las que están llegando. "Los publicistas podrán calcular en todos los canales y de forma integrada, cuál es el retorno de su inversión, a quién llegó su aviso y cuál fue el costo de llegar a esos clientes".