Hace poco más de un año que el grupo español González Byass, una de las bodegas más grandes de España, conocida por el jerez Tío Pepe, tomó el control de Viñedos Veramonte, luego de adquirir la participación de la familia Huneeus, y ya puso en marcha su estrategia para expandirse a nuevos mercados.
“La idea de ellos es apoyar el proceso de agricultura orgánica (de Veramonte), ser un jugador importante en ese aspecto, con una visión más global”, explica el nuevo gerente general de la viña, Rodrigo Soto.
Este año, Veramonte recibió la certificación de sus más de 500 hectáreas y la primera producción, que será de Sauvignon Blanc, estará en el mercado a fin de año.
Asegura que antes de la llegada de los españoles, “nosotros teníamos una visión orientada a un mercado específico que era Estados Unidos. Los González aprecian ese know how, pero ellos aportan conocimiento europeo, de Asia y otros mercados que son relevantes como Inglaterra, México y China”.
Soto, que también es el enólogo jefe, dice que esperan ingresar a España, aprovechando la espalda del grupo para sumar presencia.
“En términos comerciales la idea es hacer de Viñedos Veramonte una marca más internacional de lo que era antes”, detalla.
Asegura que respecto a los planes de crecimiento, “hay que ser cautos”. Pese a ello, van a reforzar su mix de productos de vinos que son Ritual, Primus, Neyen, sin descuidar Veramonte. A nivel productivo este año cerrarán con 200 mil cajas y esperan llegar a las 260 mil en los próximos tres años.
La sociedad hoy está compuesta por las familias González Byass y por la Rojas, que es el socio chileno dentro de la empresa.
“A los nuevos dueños les interesa tener el criterio y la participación de un socio local, porque así hay conocimiento del mercado nacional”, comenta Soto.
¿Plan de inversión en marcha? El ejecutivo comenta que “eso siempre se va reforzando”, pero el controlador tiene una estructura comercial importante a nivel mundial y el beneficio es que “vamos a utilizar parte de eso para nuestros vinos y esa es la gracia de trabajar con grupos internacionales: que nosotros como Veramonte no tenemos que hacer esa inversión, pero sí podemos aprovechar la estructura que ya existe”.
Viña boutique
Diez años lleva la compañía con su viña boutique Ritual, que al igual que Veramonte está en Casablanca y elabora vinos provenientes de parcelas seleccionadas rodeadas por 2.500 hectáreas de bosques nativos. Una de las características es que se abastecen de uvas 100% propias.
“Al hacer un vino de la misma manera se producen diferencias, y esas diferencias se embotellan por separado. Así es como Ritual nace como un hermano mayor, como la versión mejorada de lo que se venía haciendo (en Veramonte)”, explica Soto.
"Chile debe ser un productor serio y de calidad"
Varios han sido los grupos de inversionistas que han llegado al país y han entrado a la propiedad de viñas. Rodrigo Soto, gerente general de Veramonte y enólogo jefe, hace una distinción entre los nuevos actores que han llegado a Chile.
"Hay que separarlas. Hay inversiones en productos masivos, para suplir una demanda insatisfecha de vinos con ciertas características. Y hay otras inversiones que están orientadas a productos de calidad", comenta. Asegura que el desafío de la industria tiene que ser "ambicioso, para que Chile se posicione finalmente como un productor serio y de calidad, y que no sea considerado como una buena alternativa porque el precio es conveniente. Tenemos que ser más que eso". Agrega que el valor de las empresas va a estar en buscar sinergias, en buscar imagen país y asociatividad. "Todos los elementos que nos permitan dar una imagen atractiva de nuestro país y hacer que Chile sea más exitoso en los mercados que nos interesa", concluye.