Por primera vez, un grupo de grandes empresas del país -Colbún, Bayer, Indura, Iansa y Enex, entre otras-, pertenecientes al Club de la Innovación, se reunió con el centro de excelencia alemán, Fraunhofer Chile Research, para generar lazos y desarrollar eventuales proyectos de investigación e innovaciones de alto impacto.
Además de poner a disposición las instalaciones, capital humano avanzado y centros que poseen en el mundo, el gerente general de la entidad, Wolfgang Schuch, señala la importancia de compartir el riesgo económico que implica invertir en innovación. Por ello, actúan de puente para levantar capital y los conectan con subsidios que entregan diversas entidades, como por ejemplo, Corfo. Con esto, acota, “será más fácil que las firmas abran sus procesos de innovación. Si podemos trabajar con, al menos dos compañías, sería muy exitoso”.
Lograr que las empresas realicen investigación aplicada es crucial para incrementar la innovación en el país, sostiene Iván Vera, director del Club de Innovación. Comenta que de las 45 firmas que integran el club, sólo 15 o 17 saben realmente innovar en procesos o productos. Este año la entidad cumple diez años, lo que marca el comienzo de una nueva etapa de desarrollo, donde espera que Fraunhofer sea un aliado.
Para concretar el encuentro entre las firmas y el instituto, pondrán sus fichas en dos etapas. La primera, es captar el interés de la compañía por esta metodología y la segunda, realizar un workshop (en diciembre próximo) donde las compañías del Club de la Innovación llevarán sus proyectos para comenzar a establecer los primeros lazos de trabajo.
“El valor del club es poner un tema, hacer la convocatoria y traer a los expertos. Es como mezclar el pisco con el limón, el azúcar y hacer el pisco sour. Hacemos que ocurra la innovación donde tiene sentido”, explica Vera.
Método atractivo
Sebastián Jukic, gerente de Planificación Comercial de Enex, señala que les parece “atractivo” este modelo de trabajo, ya que está la experiencia alemana detrás y una cantidad no menor de científicos dispuestos a poner sus conocimientos al servicio de la empresa.
“Ahora hay que recorrer un camino para ver qué tecnologías están disponibles y cómo se aplica a los proyectos específicos de una empresa”.
A su vez, José Luis Irarrázaval, gerente general de Iansa, precisa que la exposición de Schuch “nos ha dado algunas luces sobre las herramientas y prácticas que nos permitirían avanzar en ese camino”.
Pedro Riveros, subgerente general Corporativo de Indura, precisa que actualmente están trabajando con distintas universidades y esta instancia sería otra forma de trabajar, por lo cual se muestra dispuesto a conocer.
“Para nosotros un tema prioritario es la innovación. Esto es parte importante de nuestro ADN y de lo que queremos dar continuidad”, puntualiza Riveros.
Por su parte Claudio Álvarez, gerente general de Bayer, compañía que ya trabaja con este instituto, sostiene que la llegada de este tipo de entidades dedicadas a la investigación aplicada son “tremendamente útiles” para el país.
Añade que esta es una gran oportunidad, pues se llena un vacío “desde el punto de vista de tender el puente entre la investigación y el producto final”.
Explica que “Fraunhofer dice cuáles son las necesidades de productos y no al revés. Son metodologías que han dado muestras claras que funcionan. Se trata de cómo proyectamos a nuestras empresas para el futuro. Si no hacemos lo que se está necesitando en el mercado, y lo que el país está requiriendo, va a venir otro y lo va a hacer. Tener esto acá es una gran oportunidad”, concluye.