La percepción del consumidor sobre la economía volvió a retroceder en abril, anotando su nivel más bajo en cinco años, desde marzo de 2003.
El Índice de Percepción del Consumidor (IpeCo), que elabora mensualmente el Centro de Investigación en Empresas y
Negocios (CIEN) de la Universidad del Desarrollo (UDD), en conjunto con Mall
Plaza, bajó desde 106,1 puntos en marzo, a
105,1 puntos en abril, lo que significa también una pérdida de 30,3 puntos en
relación al mismo periodo del año anterior.
Esta leve contracción es
explicada principalmente por el Índice Coyuntural, el cual retrocedió 4,7
puntos respecto del mes de marzo, mientras que el Índice de Expectativas
aumentó en 0,3 puntos en igual periodo.
Este indicador está compuesto por las variables de situación económica actual y desempleo
actual. Si bien, la percepción de los consumidores respecto de la situación
económica actual aumentó su optimismo, esta expansión fue opacada por la contracción
de la variable del desempleo actual, donde aumentó la participación de
consumidores que manifestaron que el desempleo actual es mayor que hace un año
atrás, desde un 31% en la medición anterior a un 37,6% en la medición de abril.
Con respecto al Índice de
Expectativas, es decir, la
percepción acerca de la situación económica futura, ingresos futuros y
desempleo futuro, presentaron diferentes efectos, algunos expansivos y otros
contractivos. Los consumidores que percibieron que la situación económica será
peor en los próximos meses disminuyeron desde 18,6% en marzo a 17,8% en abril.
En
lo relativo a las expectativas de ingresos futuros, un 10,9% de los
consumidores piensa que éstos serán menores, comparado al 14% del mes anterior.
Por último, la percepción de los consumidores respecto del desempleo futuro registró
una caída en su optimismo desde un 29,1% en marzo a un 25,6% en abril y un
pequeño aumento de la participación de respuestas pesimistas desde un 27,5% en
el mes anterior a un 29,5% en la presente medición.
Situación por estratos
El estrato D y E, en comparación a los otros sectores, son
los menos optimistas. El estrato D
manifestó un mayor pesimismo en las variables situación económica futura e
ingresos futuros en comparación a la medición de marzo.
En el caso de la
situación económica actual y el desempleo actual el sector E mostró un mayor
pesimismo en relación a la medición anterior;
en la variable desempleo futuro fue el sector ABC1 quien exhibió un
mayor pesimismo al compararlo con la del mes de marzo.
En el extremo optimista,
el estrato ABC1 manifestó un mayor optimismo en las variables sobre el
desempleo actual, sobre la situación económico futura y sobre los ingresos
futuros; el sector C2 fue el más optimista en la variable sobre la situación
económica actual. Por último el estrato ABC1 es el más optimista en la variable
sobre el desempleo futuro.
Regiones
A nivel regional, experimentaron comportamientos
opuestos el IpeCo de la octava región y el IpeCo de La Serena, debido a que el
de la octava región exhibió una fuerte expansión de optimismo y el IpeCo de La
Serena experimentó una contracción de optimismo.
En el caso de la octava región, el índice se situó en 120,2 puntos, 35,2 puntos sobre el del mes de
marzo. La razón de esta expansión se puede explicar por el significativo
aumento del indicador coyuntural y también del indicador de expectativas. El
coyuntural pasó desde 101,9 puntos en marzo a 159,6 puntos en abril y el
indicador de expectativas avanzó 28 puntos respecto a la medición anterior.
El nivel del indicador de La Serena, se ubicó - al
igual que el índice general- en un nivel inferior a la medición del mes de
marzo, siendo éste quien experimentó una mayor contracción, la explicación para
ello está dada por una peor percepción de los consumidores en las variables
coyunturales.