La economía latinoamericana seguirá creciendo este año
a un fuerte ritmo, del 5,4%, a pesar de la crisis financiera, según la estimación
del informe Latinwatch, elaborado por el Servicio de Estudios del BBVA.
La directora del estudio, Sonsoles Castillo, explicó a
EFE que esta previsión reduce en un punto porcentual el crecimiento
latinoamericano con respecto al de 2007, pesar de lo cual es una perspectiva
optimista, si se tiene en cuenta que las turbulencias financieras
internacionales están haciendo revisar a la baja las proyecciones de la mayoría
de las economías desarrolladas.
Según el estudio, América del Sur vive en la actualidad
un proceso de expansión económica desconocido para la región desde la década de
los 70, situación que le permite soportar la crisis mundial con cierta
solvencia.
"Frente a la ampliación de los efectos que otros
shocks financieros han tenido en la región, se está observando una cierta
amortiguación", apuntó a EFE la supervisora del informe.
Los puntos fuertes que protegen a la economía
latinoamericana son fundamentalmente la diversificación exportadora, la
fortaleza de la demanda interna, y la solvencia financiera de la región.
En el caso de las exportaciones, según Sonsoles
Castillo, están diversificando sus destinos de forma "lenta, pero muy
destacable", lo que beneficia al comercio exterior de la región.
A esto hay que añadir la fortaleza de la demanda
interna, no sólo por el crecimiento del consumo privado, sino sobre todo por el
importante aumento de la inversión, que el pasado año creció un 8 %.
"El dinamismo en la inversión es muy claro sobre
todo en algunos países, lo que hace que se consigan porcentajes de inversión
respecto al PIB no vistos ni siquiera" en la anterior época de gran
expansión.
Además, añadió, "la región goza de un mayor grado
de solvencia, gracias a la reducción de su endeudamiento".
Por último lugar, el informe destaca la fuerte
acumulación de reservas internacionales con que cuentan estos países.
Todas estas características hacen que las previsiones
para 2008 estén en línea con el crecimiento de años anteriores, y suponen un
"colchón" que moderará las consecuencias de la crisis internacional
en Latinoamérica.
A pesar de ello, el Servicio de Estudios de BBVA señala,
entre los posibles riesgos para las economías de la región, el encarecimiento
de las materias primas, un aumento adicional de la aversión al riesgo y la
"pérdida de control" de la inflación.