Los productores chilenos de salmón rechazaron hoy un
artículo publicado en el New York Times según el cual en este país se utilizan
hormonas para aumentar el crecimiento de los peces y antibióticos en el
tratamiento del virus ISA (anemia infecciosa).
Tras la publicación, la cadena estadounidense de supermercados "Safeway”
suspendió sus compras de salmón chileno, medida que los productores esperan sea
temporal.
El canciller Alejandro Foxley consideró hoy que la publicación "tomó una
posición muy negativa” respecto de una de las industrias "más exitosas” de
Chile.
"Vamos a estar atentos para apoyar una acción internacional que desmienta
algunos hechos que ahí se afirman y que no están para nada comprobados",
dijo Foxley a los periodistas, en Valparaíso.
Agregó que la
Subsecretaría de Pesca y la Dirección de Relaciones
Económicas Internacionales (Direcon), de la Cancillería, están
preparando un planteamiento público, en nombre del Gobierno y que éste pidió
hacer otro tanto a los productores para aclarar, "punto por punto",
lo que se señala en el artículo.
César Barros, presidente de la
Asociación de Productores de Salmón (SalmonChile), recordó,
en declaraciones a medios locales, que "en Chile está prohibido el uso de
hormonas y el uso de antibióticos está sumamente regulado".
Según Barros, el periódico neoyorquino fue mal informado por el profesor
chileno Felipe Cabello, que en el artículo argumenta que existe un alto
hacinamiento en las jaulas (de salmones) y por Arne Hjeltnes, portavoz de la
empresa noruega Marine Harvest, con fuerte presencia en Chile, que admite la
aplicación de antibióticos a los peces. Hjeltnes, en todo caso, matizó que los
medicamentos cumplen las regulaciones medioambientales de Chile.
Barros dijo que la organización que encabeza gestiona un rápido viaje a Chile
de expertos de Administración de Alimentos y Drogas (FDA) de los Estados
Unidos, para que comprueben en terreno las inexactitudes del artículo de
prensa.
"Lo más importante es trabajar con el Gobierno para apurar la venida de la FDA a Chile y con eso borrar
todas las suspicacias respecto de la situación", dijo Barros.
Los productores ya se han puesto en contacto con los ministerios de Hacienda,
Economía, Relaciones Exteriores e Interior para promover el plan de
contingencia, señaló César Barros.
El Virus ISA afecta solo a los salmones, altamente infeccioso, fue detectado el
año pasado en plantas productoras en la zona de Chiloé, a 1.000 kilómetros
al sur de Santiago, y más recientemente en algunas de Aysén.
Como no existe un tratamiento, un plan puesto en marcha por el Servicio
Nacional de Pesca incluye principalmente la eliminación de los peces infectados
y restricciones en el movimiento de los salmones, para evitar su propagación.
El año pasado, Chile exportó 397.039 toneladas de salmón, un tres por ciento
más que en 2006, por un valor de US$ 2.241,71 millones (2% más que en 2006).
De ese volumen, 106.766 toneladas y US$ 803,73 millones correspondieron al
mercado estadounidense.