El Gobierno argentino declaró hoy de
interés público el proyecto para la construcción de un túnel
ferroviario que conectará con Chile a través de la Cordillera de los
Andes y que busca potenciar el comercio entre ambos países.
La presidenta argentina, Cristina Fernández, consideró este
miércoles que se trata de una "obra fundacional" que deja en claro
que los dos países están "iniciando una etapa diferente" en la que
piensan "nuevamente en grande".
"Esta es una obra de iniciativa privada que ha sido declarada de
interés binacional", destacó Fernández en alusión al proyecto de la
empresa Corporación América (CASA), que demandará una inversión de
unos US$3.000 millones con un plazo de ejecución de siete
años.
El proyecto inicial implicaba solo la rehabilitación del
Ferrocarril Trasandino Central, lo que suponía una solución
"incompleta" al problema de saturación del transporte entre ambos
países, señaló CASA, propiedad del empresario argentino de origen
armenio Eduardo Eurkenian.
La iniciativa actual, que habilitará el transporte de 30 millones
de toneladas de carga al año, contempla la construcción de un portal
argentino y otro chileno a 2.500 metros sobre el nivel del mar cada
uno y un túnel ferroviario de 23,5 kilómetros de extensión.
Corredor Bioceánico
La vía del ferrocarril, que se denominará Corredor Bioceánico,
permitirá abrir una conexión alternativa al paso internacional
Cristo Redentor, que durante el invierno se cierra numerosas veces
por las fuertes nevadas y deja a cientos de camiones varados.
Cerca del 90% del comercio de bienes entre Chile y
Argentina cruza por este paso internacional.
"Hace unos años los argentinos no sabíamos qué podía pasar al día
siguiente, pero hoy podemos pensar en realizar emprendimientos como
éstos, que significa vincularnos por la cordillera y por un
ferrocarril con Chile", enfatizó la presidenta Fernández.
La compañía CASA hizo su propuesta después de que el concurso
internacional convocado por Argentina y Chile fuera declarado
desierto, ya que el único proyecto recibido, el de la argentina
Tecniagua, no se adecuaba a los requerimientos técnicos.
La propuesta será desarrollada por un consorcio internacional,
liderado por CASA e integrado por las argentinas Tecniagua y
Cartellone, la brasileña Camargo Correa y varias compañías chilenas
como Petrolera del Sur.
"La creación del corredor bioceánico consolidará la integración
de América Latina, permitiendo la conexión de los mercados de Asia,
Chile, el Mercosur (bloque integrado por Argentina, Brasil, Paraguay
y Uruguay) y los mercados del Atlántico", enfatizó la compañía.
El antiguo Transandino Central comenzó a construirse en 1872 y se
inauguró en 1910, pero el servicio de pasajeros fue interrumpido en
1978 a raíz del conflicto argentino-chileno por la soberanía en el
canal de Beagle, que estuvo al borde de llevar a una guerra a ambos
países cuando eran gobernados por regímenes militares.
En 1984 quedó definitivamente fuera de servicio para el
transporte de cargas.
La rehabilitación del tren permitirá completar un corredor
ferroviario entre el puerto brasileño de Santos, situado sobre el
océano Atlántico, y los que tiene Chile en el Pacífico.
Actualmente, el transporte de cargas entre ambos países se hace
por camiones, unos 865 diarios, que llevan unas 4,3 millones de
toneladas al año.