El banco de inversión estadounidense JPMorgan fue uno de los primeros agentes extranjeros en entregar su opinión respecto a los cambios introducidos a la reforma tributaria tras alcanzarse el acuerdo entre el gobierno y la oposición el martes por la noche. A su juicio, lo convenido es un paso positivo para aumentar la confianza y la comunicación tanto con la coalición no dominante como con el sector privado y “representa un esfuerzo de las autoridades para incorporar diferentes puntos de vista en el proyecto”.
Desde el punto de vista del mercado de capitales, opinó que el principal cambio es la incorporación de un tratamiento de impuestos alternativo para las compañías y los accionistas, dando a las empresas la opción de pagar mayores impuestos corporativos a cambio de que los accionistas paguen impuestos personales solo de dividendos en lugar de las ganancias acumuladas.
La entidad estimó que los cambios probablemente serán positivos para las empresas no cotizadas, mientras que en el caso de las compañías en bolsa “la diferencia entre un sistema y otro no es significativa” (menos de 2,5 pp del pago de impuestos total en promedio).
“Considerando esto, mientras este acuerdo podría ser beneficioso para la confianza empresarial, el impacto directo para las compañías listadas es limitado”, dijo JPMorgan.
En este contexto, indicó que mantienen una visión ‘Neutral’ para el mercado chileno dada la desaceleración económica en curso y valorizaciones justas, “y no esperamos una reacción significativa en el mercado accionario respaldada por este acuerdo”.
Otras modificaciones
La entidad no ve un impacto significativo de los cambios en las acciones de las compañías de bebestibles que operan en bolsa y forman parte del IPSA -Andina, CCU, Concha y Toro, Embonor- y que reaccionaron ante el envío del proyecto al Congreso para su discusión.
Desde su óptica el hecho que las empresas no estén a cargo de los impuestos en nombre de los accionistas añade complejidad pero debería mejorar la liquidez.
Finalmente, sostuvo que el resto de los cambios, como los beneficios para las PYME o una tasa impositiva menos agresiva para los bienes raíces, si bien tienen un efecto directo menor en el mercado bursátil “podría ayudar a mejorar el sentimiento local”, al generar incentivos para acelerar la inversión.
“Las modificaciones propuestas están todavía en una etapa temprana, y varias definiciones todavía no se han detallado en el fin de conocer completamente su impacto, pero de manera preliminar que vemos esto como una buena señal”, concluyó el informe.