DF Lab Opinión /Los datos, el nuevo petróleo
"¿Qué se hace con los datos? ¿Para qué sirven? La respuesta pasa por la información que generan, la que permite tomar mejores decisiones, más informadas y en menos tiempo".
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Las empresas y entidades han optado por almacenar y analizar sus datos en la nube. Sus volúmenes han aumentado a un ritmo tan acelerado, en tan poco tiempo, que cada vez se dificulta más su gestión. Y se trata de una tendencia que seguiría al alza de cara al futuro.
De acuerdo con el IDC Latin America Public Cloud Services Tracker 2022H1, IDC estima que para el 2023 la nube en Latinoamérica crecería 33,2%, mientras que para Chile específicamente se prevé que el crecimiento se sitúe cercano al promedio de la región, con una tasa de alrededor del 31,5% para servicios de nube empresarial.
¿Pero por qué se ha optado por la nube? ¿Qué se hace con los datos? ¿Para qué sirven? La respuesta pasa por la información que generan, la que permite tomar mejores decisiones, más informadas y en menos tiempo.
De esta manera, los datos y su análisis han sido la clave en los procesos de innovación y reinvención que han llevado a cabo diferentes compañías en los últimos años. Y hoy en día, si se cuestiona cómo se seguirán reinventando las empresas y organizaciones de cara al futuro, la respuesta sigue siendo la misma: los datos.
Una parte esencial de esta arquitectura moderna la conforman el data lake, un repositorio centralizado ubicado en la nube, que permite almacenar datos estructurados y no estructurados a cualquier escala. De esta manera, las organizaciones recopilan sus datos a partir de diversos silos para agruparlos en un solo lugar, logrando una gobernanza unificada y permitiendo ejecutar diferentes operaciones sobre ellos de forma segura: procesamiento de datos, análisis en tiempo real y uso de modelos de machine learning y visualizaciones.
Diferentes empresas a nivel global han optado por el almacenamiento y los análisis de datos en la nube, para poder agilizar los procesos. La empresa de biotecnología Moderna, Inc. fue una de estas compañías, la que ha demostrado el poder de análisis de sus datos en la nube con la rapidez con la que entregó su vacuna COVID-19, de gran eficacia. Moderna ha aprovechado la potencia de la computación bajo demanda y el machine learning (ML) para acelerar el descubrimiento y el desarrollo y, además, ha creado una capacidad de análisis en tiempo real en sus instalaciones de producción.
Asimismo, hay compañías que ante el gran volumen de datos y su continuo crecimiento, han optado por el uso de los data lakes. Tal fue el caso de Coca-Cola Andina, empresa que vio en esta herramienta una solución para promover el crecimiento de su negocio, aumentando su productividad y entregando aún más calidad en sus servicios. Al adoptar almacenamiento, bases de datos, cómputo y capacidades analíticas, la compañía logró incrementar los resultados del equipo de análisis en un 80%, permitiendo al propio negocio y a sus clientes tomar decisiones más rápidas a partir de datos confiables.
Estos son solo algunos ejemplos de cómo el análisis, la velocidad y agilidad son clave en los procesos de modernización. La cantidad de datos seguirá al alza, por lo que se debe tener las herramientas para aprovecharlos desde sus diferentes orígenes y analizarlos de diferentes maneras.
Sin dudas, la próxima ola de reinvención estará basada en una arquitectura moderna de datos, teniendo la posibilidad de extraer información con rapidez, generar su análisis y tomar una decisión de forma más rápida y con mayor asertividad; atendiendo de mejor manera sus propias necesidades, así como las de sus clientes.