Parte del paisaje santiaguino implica ver a cientos de repartidores dedicados al “delivery” de alimentos en distintos envases que cumplen con diversos requerimientos, sellos irrompibles, innovando en tamaños, formas y diseños. La situación que se vive en otras ciudades del país es similar, aunque ha experimentado cambios desde el origen de la pandemia que van de la mano con la instalación de las cuarentenas, las restricciones de movilidad y la imposibilidad de funcionar de grandes cadenas de comida en malls.
Envases de un sólo uso
Para poder adaptarse a este nuevo modelo, un actor fundamental es el packaging, así DPS -compañía con más 30 años de experiencia en la importación y distribución de productos descartables para alimentos- ha debido realizar cambios importantes para cumplir con las exigencias del nuevo tipo de consumidor de alimentos además de implementar nuevas rutas para, entre otras cosas, llegar a tiempo con el pedido.

Así lo explica Julio Ortiz, Gerente de la Zona Sur de DPS Chile, quien entrega una solución logística de envases descartables para alimentos. El profesional señala que tras la pandemia el foco del negocio se ha centrado en los envases de primer uso o primera necesidad para comida rápida.
Ortiz agrega que, pese al cese de operaciones de algunas de las grandes cadenas de comida rápida, el uso de envases se ha compensado con la reinvención de muchos particulares y pymes, que han visto en los nuevos servicios de alimentación una oportunidad de negocio. “Ellos son los que han impulsado a nuestra compañía a ir sumando nuevas líneas de productos en función de las nuevas tendencias de packaging y así aportar con productos de calidad a estas nuevas iniciativas de trabajo”, señala el ejecutivo y agrega: “Las nuevas pymes de alimentos nos han hecho trabajar duro para satisfacer sus necesidades”.

“En este rubro hay un alza bastante importante, con generación de clientes nuevos de consumos menores, pero igual de importantes para nosotros, han tenido una escalabilidad que es muy destacable. La nueva tendencia es ir cambiando los envases de un solo uso, como son las bombillas o los vasos de plástico por envases eco amigables, con una introducción progresiva e importante en los distintos mercados, porque hay una sensibilidad mayor a la contaminación ambiental y queremos ser un aporte activo en ese proceso”.
Rutas eficientes
Junto al alza de nuevos emprendimientos, pequeños locales y particulares que se dedican a la venta de alimentos, se ha notado un cambio en la distribución, debido al aumentos de nuevos clientes, muchos de ellos que se encuentran en zonas más alejadas de las ciudades, lo que ha significado para los proveedores un esfuerzo extra para lograr atenderlos de la mejor forma. "Así generamos nuevas rutas que nos permiten cubrir distintas necesidades", señala Ortiz.

“Tenemos las entregas sectorizadas por regiones, en la zona sur contamos con sucursales y bodegas en ciudades como Talca, Concepción, Temuco y Puerto Montt. Esto nos permite abarcar en forma programada los distintos puntos regionales, desde Teno hasta el sur de la isla de Chiloé y todos los pueblos intermedios". Estos cambios nos han obligado a generar nuevas rutas y un nuevo concepto de atención de clientes generando nuevos modelos e incluyendo operadores de reparto externos que permiten mayores y mejores frecuencias de abastecimiento” agrega.