El dólar pisó a fondo el acelerador. Y no sólo frente al peso chileno sino también frente a una serie de divisas, en especial la de los países emergentes y de América Latina.
La divisa estadounidense se cotizó en puntas de $ 673,70 comprador y $ 674 vendedor, lo que implica un fuerte salto de $ 8 en relación al cierre de ayer miércoles. Se trata de su nivel más alto desde el 5 de diciembre de 2008.
La sesión se presentó especialmente favorable para la depreciación de la moneda nacional. En medio de otra negativa sesión para las bolsas chinas, el precio del cobre experimentó un retroceso de 1,14% en la Bolsa de Metales de Londres y cayó a nuevos mínimos en seis años y medio, cotizándose en US$ 2,37.
"Creo que el tema de China es muy relevante. Nadie sabe qué hay detrás y contra eso los commodities van a seguir con mucha volatilidad y con mas sesgo bajista. No veo fundamentales que pudieran parar eso", dijo un operador de la plaza local.
Sin embargo, fue el dato del PIB estadounidense el que aceleró el desplome del peso chileno. Si bien estuvo por debajo de lo que esperaba el mercado, la cifra confirmó las expectativas de que la Reserva Federal elevará las tasas este año.
Ayer, precisamente, la entidad dirigida por Janet Yellen dijo que la mayor economía del mundo había mejorado, dejando abierta la puerta para el inicio del ciclo de alzas de tasas luego de varios años en mínimos históricos.
El dato del PIB estadounidense aceleró la fortaleza del dólar a nivel global. El euro estaba por debajo de los US$ 1,10 y el peso mexicano llegaba a mínimos históricos de 16.359 pesos por unidad.
Hace algunos días, Société Générale recomendó apostar contra el real brasileño y el peso chileno. En esa línea, la entidad financiera estimó que el tipo de cambio local llegará hasta $ 700 en el tercer trimestre y a $ 690 en el cuarto trimestre.
"El dólar rompió un techo clave que era $ 667,5. Para mí (la tendencia) es para arriba, a menos que lo intervengan", sostuvo el operador. "Nadie quiere emergentes, menos Chile", agregó.
La cotización también coinicidió con cifras macroeconómicas a nivel local que, sin embargo, estuvieron por encima de las expectativas del mercado. Producción industrial subió 1,6% en junio, gracias al buen comportamiento de la minería y las manufacturas. Las ventas del comercio, en tanto, anotaron alza de 4,1% durante ese mes.
Aunque algunos operadores dijeron que esto ayudó a amortiguar la caída del peso, otros expertos creen que las cifras locales no debieran influir en el corto plazo en el tipo de cambio.
Bci Estudio dijo en ese sentido que las monedas emergentes continuarán depreciándose y que las cifras sectoriales locales no cambiarían la visión para el escenario interno. "Así, consideramos que permanecerán las presiones depreciativas para el peso chileno", dijo Antonio Moncado, economista de Bci Estudios.
ForexChile consignó en ese sentido que las minutas del Banco Central conocidas esta mañana confirman el hecho de que estamos lejos de ver movimientos en la tasa local.