Jon Martínez, director del Centro de Familias Empresariales del ESE: “Las nuevas generaciones se sienten más atraídas a temas sociales que empresariales”

El director del Centro de Familias Empresarias del ESE Business School, de la Universidad de los Andes, Jon Martínez, lleva más de 20 años asesorando en distintas materias a grupos de familias empresarias.

Recientemente, Martínez lanzó el libro “Empresas familiares: reflexiones inspiradoras que mueven a la acción a empresarios y sus familias”, donde aborda las principales tendencias de este segmento.

En entrevista con DF, el académico indica que actualmente las empresas familiares están destinando sus esfuerzos a preparar la gobernanza y la sucesión, pero las generaciones más jóvenes han incrementado su interés en temas sociales por sobre los empresariales.

“En Latinoamérica hay tres líderes de family office: Brasil, México y Chile. Los dos primeros por su tamaño y fortuna. Entonces relativo al tamaño, Chile sin duda comanda”

“Este libro es el fruto de 30 años de mi vida, logré juntar diferentes reflexiones con familias empresarias y también todo el trabajo académico que he hecho con colegas”, afirma.

- ¿Cuáles son las principales conclusiones de su libro?

- Hay muchas, pero una que es compartida por todo el libro es que no solo las empresas familiares tienen que ser muy profesionales separando bien los negocios de la familia, sino que también, las familias empresarias tienen que ser muy profesionales, estudiar, preparar la gobernanza y la sucesión. 

- El libro se refiere al núcleo familiar y generar propiedad, ¿cómo se ve esto en las empresas familiares?

- El ser humano nace con el concepto de propiedad, es como un sello en las familias. Esto se da cuando nos solemos concentrar en nuestro propio núcleo familiar, donde se da mucha más importancia a centrarnos en nuestros propios hijos.

Proceso de sucesión

- ¿Esto podría explicar por qué en algunas empresas asume la conducción un hijo por sobre otro miembro del grupo familiar?

- Eso ocurre en empresas más pequeñas, que tienen un solo dueño y tiene la ilusión de que sea su hijo el que sea el sucesor en la empresa. Puede pasar por una falta de confianza en otras personas, pero es un error, porque puede llevar a una mala administración de la empresa.

- ¿Ha evidenciado desmotivación en las nuevas generaciones por hacerse cargo de las empresas?

- En los últimos años he observado que las nuevas generaciones no están tan interesadas, creo que hay un tema generacional de verse seducidos por otras cosas distintas a lo que hacen sus papás.

El estallido social marcó una clara tendencia de los jóvenes a atraerse más a temas sociales que empresariales. Además, existe menor respeto a la autoridad, los jóvenes quieren ser sus propios jefes, hay como un deseo de más libertad.

- ¿Cuál es el rol actual de las mujeres en las empresas familiares?

- Todavía subsisten ciertas conductas machistas, tanto de hombres como de mujeres, a veces ellas eligen abstenerse. Pero he visto muchas más mujeres en cargos altos, ya sea el directorio o el consejo de familia. Esto también creo que se explica por el teletrabajo y la facilidad que da para compatibilizar el trabajo con la crianza.

- ¿En el núcleo familiar se potencia tanto al hombre como a la mujer?

- Sigue habiendo mayor preocupación porque sean los hombres quienes dirijan las empresas familiares. Creo que ha ido cambiando porque las mujeres están estudiando carreras relacionadas. Pero existe una tendencia de las mujeres a no adoptar altos cargos, porque se contrapone con su idea de tener hijos y criarlos, prefieren cargos de segunda línea.

- ¿Cuáles son las principales tendencias que ve en las familias de alto patrimonio?

- Veo que las familias de alto patrimonio se están preocupando mucho de formar un buen gobierno corporativo y familiar, es decir, se están preocupando de generar un legado y una sucesión que sea exitoso.

- ¿Cómo ve a Chile en materia de family office?

- En Latinoamérica hay tres líderes de family office: Brasil, México y Chile. Los dos primeros por su tamaño y fortuna. Entonces, relativo al tamaño, Chile sin duda comanda. A nivel mundial, Estados Unidos y España encabezan.