El presidente del gobierno de España, Mariano Rajoy, aseguró ayer que aún quedan momentos “muy difíciles” para la economía, pero que hay datos que se están conociendo que son buenos y que “lo peor ha pasado” en problemas como el financiamiento de la deuda.
Las declaraciones las formuló en la rueda de prensa que ofreció en Moncloa junto a la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, al hacer un balance del año transcurrido desde las elecciones en las que logró la mayoría absoluta para gobernar.
El jefe del Ejecutivo defendió las medidas económicas que ha adoptado en este tiempo, pese a reconocer que algunas “hacen daño” a los ciudadanos, y dijo que son “absolutamente imprescindibles” para la recuperación y la creación de empleo.
A su juicio, se han disipado ya dudas sobre al irreversibilidad del euro y recalcó que el problema principal de España en este momento es su financiamiento.
En este ámbito, el personero consideró que “lo peor ha pasado”, pero explicó que aún hay que lograr financiarse a precios razonables.
Rajoy añadió que su administración es la primera que ha tenido la “sensibilidad” de adoptar medidas antidesahucios y añadió que son “equitativas, justas, razonables y eficaces” y que no dañarán la economía española.
La autoridad indicó que la obligación del gobierno es resolver el mayor número de problemas posibles, “pero intentando evitar que se produzcan otros problemas mayores”.
Salida de la crisis
El presidente del gobierno, a su vez, dijo tras la clausura de la XXII Cumbre Iberoamericana que España podría volver a crecer antes de lo anunciado “si mejora la financiación”.
Si las previsiones del Ejecutivo y sus últimas declaraciones públicas dejaban entrever que el PIB sólo comenzaría a crecer a partir de 2014, Rajoy se mostró más optimista de lo habitual tras la reunión con una veintena de dirigentes internacionales y un numeroso grupo de observadores internacionales.
El gobierno esperaba que el PIB cayera 1,5% este año y 0,5% el año que viene, lejos del crecimiento de países iberoamericanos que crecen a un ritmo superior al 10%. En definitiva, el presidente opina que sus previsiones podrían ser incluso pesimistas si España no tiene que pagar en 2013 40.000 millones de euros por culpa de los intereses de la deuda pública. ¿Cómo puede lograrlo? Si el Banco Central Europeo sale al rescate de España con todas las garantías.
Las palabras de Rajoy fueron claras: “España podría adelantar la salida de la crisis antes de 2014 si mejora el financiamiento”.
Rajoy garantizó a los líderes latinoamericanos que dará toda clase de facilidades a las empresas que decidan invertir en España.
“Si América Latina es una oportunidad para Europa nosotros también lo somos para ustedes”, aseveró.
Residencia a extranjeros
En otro plano, ayer se conoció en España que el gobierno estudia conceder la residencia a los extranjeros que compren pisos de 160.000 euros
En todo caso, Rajoy aseguró que todavía “no hay tomada ninguna decisión”.