Por Pilita Clark
Doha
Los cuerpos inversionistas internacionales que representan a instituciones con más de US$ 10 billones (millones de millones) de activos dijeron que un fondo diseñado para ayudar a países pobres a reducir las emisiones está en riesgo de ser “estrangulado al nacer” en las negociaciones climáticas anuales de Naciones Unidas que se están desarrollando esta semana.
En una señal del antagonismo que ha eclipsado las conversaciones en Doha, la capital de Qatar, 17 países liderados por China e India han dicho a la conferencia que la ONU debería permitir vetar cualquier inversión realizada por el nuevo fondo verde para el clima.
Esa jugada podría ser insostenible para los inversionistas del sector privado que se supone que debería alentar, advirtieron los directores de los dos grupos de inversión internacionales.
“Creará mucha incertidumbre y evitará que las personas inviertan”, dijo Stephanie Pfeifer, del Grupo de Inversionistas Institucionales sobre Cambio Climático, que representa a muchos de los fondos de pensiones y administradores de activos de Europa.
“Sería como un gobierno estableciendo un vehículo de inversiones y al mismo tiempo haciendo que cada inversión que realiza vuelva al parlamento”, dijo Nathan Fabian, del Grupo de Inversionistas sobre Cambio Climático en Australia y Nueva Zelandia.
“Si uno de los objetivos del fondo verde para el clima es atraer inversión del sector privado, esto lograría lo contrario. Significaría que el fondo estaría estrangulado al nacer”.
Una propuesta oficial a la conferencia de parte del grupo de 17 países, que también incluye a Arabia Saudita, Irán e Irak, dice que el directorio del fondo debería desarrollar formas de asegurar que “una decisión de financiamiento particular podría ser reconsiderada” en las reuniones de la ONU.
El fondo verde para el clima fue lanzado hace un año.