Por primera vez desde la independencia de Singapur en 1965, los partidos de la oposición se disputan todos los escaños en las elecciones generales del 11 de septiembre contra el gobernante Partido de Acción Popular (PAP). El 1 de septiembre unos 181 candidatos presentaron sus papeletas de nominación para la disputa de 89 escaños en 16 distritos electorales de representación de grupo y 13 uninominales. Se trata de la primera vez que Singapur celebra una elección sin el legendario primer ministro Lee Kuan Yew, fallecido el 23 de marzo. Sin Lee, el PAP afronta la elección desde un terreno desconocido, aunque confía en sus perspectivas.
Ni la neblina que cubre el cielo de Singapur ha enturbiado el espíritu político de la ciudad-Estado, un hervidero de mítines políticos a medida que los nueve días de campaña llegan a su fin. El fervor se puede medir en el número de mítines simultáneos: ayer, a la hora del almuerzo, tanto el PAP como otros 11 partidos tenían agendado un encuentro en el distrito financiero.
En las últimas elecciones, celebradas en mayo de 2011, todos los asientos estaban en disputa, con la sola excepción del correspondiente al distrito Tanjong Pagar, donde el partido de la oposición que planeaba presentar un candidato llegó tarde a la presentación de sus documentos de nominación.
Lee Kuan Yew representaba a Tajong Pagar desde 1991 y la ausencia de competencia en 2011 funcionó bien para él. El ex primer ministro se encontraba en mal estado de salud y no tuvo que involucrarse en los actos de campaña. El PAP parece confiar en que el fervor patriótico, impulsado por la celebración del 50 aniversario de la independencia de la ciudad-Estado y el fallecimiento de Lee, sea un fuerte punto de reunión para los singapurenses, aumentando las perspectivas del partido.
Las promesas de la oposición
Aunque hay factores a favor del PAP, existe la fuerte posibilidad de que la oposición aumente su margen en esta elección y que el incumbente tenga que luchar para conservar su proporción de votos. En las últimas elecciones, con un 60,1% de los votos, el rendimiento del PAP, aunque estelar en la opinión de la mayoría, fue el peor en su historia política.
Es difícil de determinar el peso exacto de la oposición aunque la asistencia a los mítines convocados desde principios de septiembre ha sido alta. Esto podría no traducirse en más votos ya que tradicionalmente la oposición ha tenido buena afluencia a sus manifestaciones, particularmente porque el PAP es una entidad conocida y probada. En sus comentarios, el primer ministro Lee Hsien Loong ha dicho que la oposición es "decepcionante", afirmando que es fácil hacer "discursos conmovedores y feroces" y reclamando que, con su representación débil, no han planteado cuestiones clave en el parlamento.
Hay más partidos de la oposición en este combate, pero es poco probable que afecten significativamente a la cuota de votos de PAP, ya que la mayoría de los nuevos partidos son pequeños y se mantendrán al margen en esta elección. Sin embargo, los mayores partidos de la oposición están haciendo muchas promesas, desde asistencia sanitaria gratuita a que no aumente la población extranjera; desde derechos para padres solteros a la incorporación de más mujeres a la fuerza laboral. En respuesta, PAP afirma que algunas políticas de la oposición podrían llevar a la quiebra al país y otras podrían ahogar a las pequeñas y medianas empresas.
Distritos disputados
La mayoría de los distritos electorales de representación de grupo parecen estar asegurados para PAP. El primer ministro está disputando Ang Mo Kio, donde se espera una fuerte competencia, pero PAP debería ganar las elecciones. En las últimas elecciones, el Partido de la Reforma presentó candidatos relativamente desconocidos y ganaron 30% de los votos. Algunos analistas vieron esto como señal de que un tercio de los singapurenses no vota por el partido gobernante, independientemente de sus logros.
También puede haber una competencia interesante en los dos bastiones del PAP, Tanjong Pagar y Marine Parade. El primero era la circunscripción de Lee, mientras que el segundo es dominio del ex primer ministro Goh Chok Tong. En esta ocasión, el ministro Chan Chung Sing, que no ha ocupado nunca un escaño, competirá por Tanjong Pagar. Se esperaba que Goh anunciara su retiro antes de las elecciones, pero decidió competir, presumiblemente para impulsar las perspectivas de PAP.
En los distritos uninominales podría haber una competencia más estrecha ya que la oposición ha presentado fuertes candidatos. Ahora que la ciudad-Estado coquetea con la idea de un parlamento más diverso, los singapurenses pueden sentirse más cómodos votando por la oposición en estos distritos ya que garantizaría que el PAP mantiene su dominio en el parlamento.
Todos partidos de la oposición comparten la idea de que un gobierno dirigido por un único partido ya no es el mejor interés para el país. Ven necesarios más controles en el parlamento para salvaguardar el interés del país en medio del implacable enfoque del PAP en el crecimiento económico a toda costa.
También está el temor de que el PAP siga ampliando la población facilitando la inmigración. El aumento de la población es un punto conflictivo: la estimación de que alcanzaría los 6,9 millones de personas en el futuro gatilló protestas entre los que ven que la densificación es responsable del colapso del transporte, salud, vivienda y educación.