La industria turística de Tailandia, que es clave para su economía, tuvo un duro 2014. Los arribos cayeron 6,6% a 24,7 millones de visitantes, según el Ministerio de Turismo. Y los ingresos cayeron 5,8%. En respuesta, el gobierno anunció una serie de medidas para aumentar el número de visitantes en 2015. Sin embargo, se espera que los principales factores que mantuvieron a muchos de los potenciales turistas lejos el año pasado –como el estado de ley marcial en el país y la debilidad del rublo ruso– continúen influyendo este año, obstaculizando los esfuerzos para incrementar los ingresos del turismo.
El aproblemado sector turístico de Tailandia es una de las razones de porqué la economía del país ha tenido dificultades para recuperar impulso luego del golpe militar de mayo. El sector representa directamente cerca de 9% del PIB, pero su contribución económica total puede llegar hasta una quinta parte del PIB, de acuerdo al World Travel & Tourism Council (WTTC). El WTTC calcula que el sector emplea a 2,6 millones de personas directamente, mientras que otras 6 millones dependen de alguna forma de los ingresos de la industria.
El principal obstáculo es que la ley marcial continúa en vigor. El hecho de que el gobierno carezca de suficiente confianza en la seguridad pública para levantarla –o incluso para establecer condiciones o poner una fecha de término– ha mantenido alejado a los visitantes, especialmente a los provenientes desde tres mercados críticos: China (la mayor fuente de visitantes), Japón y Corea del Sur. Además, los arribos de los turistas rusos, el segundo grupo más grande, han caído dramáticamente como resultado del derrumbe del rublo. El Ministerio de Turismo reportó que los arribos rusos disminuyeron 27% anual en diciembre. El número de visitantes también ha sido afectado por el muy publicitado caso de asesinato de dos viajeros británicos en Koh Tao, una isla en el Golfo de Tailandia, en septiembre, y el pobre manejo de la policía local de la investigación.
Habitaciones vacías
Los operadores turísticos de Tailandia dijeron que en general la situación mejoró en los meses finales de 2014, y las cifras oficiales muestran un aumentado de casi 12% anual en diciembre. Sin embargo, aún es poco claro si ya está en marcha una recuperación significativa. Algunos indicadores sugieren que los datos oficiales de arribos pueden exagerar la salud del sector. Según la Asociación de Agentes de Viaje de Tailandia, por ejemplo, los arribos turísticos en los dos principales aeropuertos –Suvarnabhumi y Don Mueang– cayeron cerca de 30% anual entre enero y noviembre a 2,8 millones de personas.
El decaimiento en la industria ha tenido un impacto sobre el sector hotelero. De acuerdo al Banco de Tailandia (BOT, el banco central), la ocupación hotelera en noviembre (los últimos datos disponibles) se situó en 66,7%, por debajo del 69,3% en el mismo mes del año anterior. La tarifa promedio por habitación en Tailandia central, incluyendo Bangkok, ha caído ligeramente durante el último año, reflejando una pobre demanda.
Campañas de promoción
El gobierno militar está tratando de atraer más turistas. Su campaña "descubre Tailandia" 2015 pretende bajar los precios de las visas para algunos países, agilizar el proceso de su entrega y ofrecer una visa única para visitar Tailandia, Camboya, Laos, Vietnam y Myanmar. El gobierno también ha prometido aliviar la falta de personal migratorio y salvaguardar a los turistas con mejoras a la seguridad pública e higiene. La campaña destacará doce ciudades menos conocidas de Tailandia y rutas alternativas, en un esfuerzo por ampliar el atractivo del país.
Irónicamente, dado que las reuniones públicas siguen estando prohibidas, el gobierno militar planea llevar a cabo campañas mensuales y eventos alrededor del país. El Estado ha promocionado el potencial de este tipo de eventos luego de que las autoridades turísticas organizaran una feria turística de diez días en Bangkok, que según los reportes atrajo a cerca de 600 mil visitantes y generó 230 millones de bahts (alrededor de
US$ 7 millones). En tanto, el Consejo de Turismo de Tailandia (TCT, su sigla en inglés) ha anunciado proyectos para aumentar los ingresos a través del desarrollo de software de soporte para turismo y actividades de nicho, como el cuidado de la salud y la halal, las prácticas musulmanas sobre los alimentos. El TCT es optimista al pronosticar un aumento a 28 millones de turistas durante 2015, casi 15% más que en 2014.
Aunque las iniciativas del gobierno pueden ayudar, las mejoras en el sector serán afectadas por la continua vigencia de la ley marcial y por el negativo desarrollo económico de mercados clave, especialmente Rusia. La Economist Intelligence Unit aún prevé que el sector turístico mejore lentamente en 2015. Pero será un proceso gradual, sujeto a riesgos que van desde la agitación política interna hasta la debilidad en los mercados externos relevantes.