El índice de precios al consumidor de China creció 1,5% a tasa interanual en diciembre, por sobre el 1,4% del mes anterior, de acuerdo al boletín publicado por la Oficina Nacional de Estadísticas (NBS, su sigla en inglés) el 9 de enero. En promedio, durante 2014, los precios de consumo aumentaron 2%.
La caída de los precios globales del petróleo son un factor primario detrás del débil ritmo de la inflación. A pesar de un aumento en los impuestos al crudo en noviembre, la subcategoría de combustibles y partes de automóviles disminuyó 12,3% en diciembre.
Si la fuerte caída en los precios del petróleo se mantiene en 2015, existe el riesgo de que China enfrente deflación. El crecimiento en el IPC está actualmente siendo compensado por el aumento en los costos de los alimentos (alza de 2,9% a tasa interanual en diciembre). Sin embargo, la agricultura y la logística de alimentos utilizan combustible, por lo que la caída en los precios del crudo reducirá la inflación de los alimentos en los próximos meses.
El poder de fijación de precios de las empresas está débil en todos los ámbitos, pero las presiones inflacionarias son ligeramente más fuertes en el sector servicios, donde los precios crecieron 1,8% a tasa interanual en diciembre. Sin embargo, incluso los mayores niveles en el sector son suficientemente bajos como para generar preocupación, particularmente cuando el foco de la economía está en el sector terciario.
Precios al productor
La NBS reveló también que el índice de precios al productor cayó 3,3% en diciembre, con 34 meses consecutivos de declive. El ritmo de caídas parece estar acelerándose, con diciembre registrando la mayor baja desde septiembre de 2012. Durante todo 2014, los precios al productor cayeron en promedio 1,9%. La industria pesada está en el epicentro del desplome, a medida que afronta dificultades durante el lento proceso de reducir los excesos de capacidad.