"La política es una rueda, un día estás arriba y otro
abajo". Así graficó el ex jefe de Gabinete trasandino, Alberto Fernández, su
situación política en las primeras declaraciones públicas que hizo tras
presentar, ayer, su renuncia.
"Creo que es poco lo que puedo aportar en esta
instancia porque hay cosas que vemos distintas", reconoció el ya ex jefe
de Gabinete en declaraciones a radio 10. "Me voy convencido de haber hecho
lo que tenía que hacer. Le dije a la Presidenta que es otro tiempo y que quiero
que trabaje con libertad. No he hecho esto para complicarle la vida a Cristina,
lo he hecho para facilitársela", aseguró.
Pese a lo que tildó de "decisiones distintas" con
la Presidenta, Fernández dedicó elogios a la pareja presidencial. Y aseveró que
va a estar a su lado "las veces que haga falta" porque es
"fundador" del proyecto kirchnerista. "Tengo la satisfacción de
haber acompañado a dos grandes presidentes, uno probado que es Néstor Kirchner
y la otra que los argentinos lo van a comprobar que es Cristina Kirchner",
agregó.
Quien durante más de cinco años fue una de las caras del
Gobierno ante los medios y la opinión pública adelantó, además, que ya está
"avanzando en un libro sobre los años con Kirchner" en el que también
escribirá sobre "los meses con Cristina".
También dijo que le tiene "un cariño excepcional"
a la Presidenta y que espera conservar la amistad que lo une con ella; que,
pese a lo demandante del puesto, el de jefe de Gabinete fue "un trabajo
extraordinario" que estaría dispuesto a repetir; que su sucesor, Sergio
Massa, "puede ayudar mucho a la Presidenta"; y que "con las
retenciones (móviles) se iba hacia el lado correcto".
Sobre su futuro inmediato, dijo que quizás acepte una
invitación del gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, para ir a descansar
"unos días". Y que va a "intentar pasar más tiempo" con sus
afectos y, en especial, con su hijo. "Luego de cinco años –afirmó- es un
momento soñado".